
La Cámara Boliviana de Hotelería (CBH) condenó el bloqueo de accesos a las empresas hoteleras en el Salar de Uyuni y la extorsión por parte de comunarios de Colchani que exigen sumas de dinero a cambio de permitirles operar en la zona.
La entidad, que representa a 1.200 empresas de hospedaje, expresó su enérgica protesta por el asedio a las empresas turísticas, principalmente hoteleras, asentadas en inmediaciones del Salar.
Según se informó a través de las redes sociales y medios de prensa, los comunarios exigen a los transportistas el pago de 15.000 dólares por concepto de regalías anuales y, ante la negativa de los propietarios, impiden el ingreso a los hoteles Luna Salada, Cristal Camaña y Hotel Colque.
Esta acción ha derivado en que varios vehículos queden retenidos y decenas de turistas se vean obligados a trasladarse a pie para llegar a su hotel, donde otro grupo de bloqueadores les impide el ingreso.
La Cámara considera que estos hechos son de «extrema gravedad» y ha pedido la intervención de las autoridades de gobierno para garantizar la seguridad interna del país, identificar a los responsables y sancionarlos por atentar al libre tránsito y la seguridad de visitantes nacionales y extranjeros. La entidad señala que estos hechos afectan de manera irreparable a la imagen turística nacional y al plan de reactivación económica del sector turístico.
La CBH exige a los comunarios de la zona turística deponer actitudes de manera inmediata para que retorne el clima adecuado de convivencia pacífica, en el marco del respeto a las leyes, la propiedad privada y la seguridad jurídica del país.