Las clases se inician con falta de condiciones y baja vacunación

A horas del 1 febrero, maestros y padres de familia ven con poco optimismo el inicio de las labores escolares de la gestión 2022. Para los representantes de los dos sectores, no existen las condiciones óptimas para llevar adelante las tres modalidades (presencial, semipresencial y a distancia).

Según los maestros y los padres de familia, por ejemplo, para desarrollar las clases a distancia, los problemas de conexión a internet y la carencia de equipos móviles no se resolvieron en los últimos dos años. En el caso de modalidades semipresencial y presencial, los educadores y escolares se ponen en riesgo porque muchos municipios no cumplen con la dotación de materiales de bioseguridad.

Prensa Libre

Este retorno a clases se realiza en una escalada aún lenta de la cuarta ola y con una baja cifra de vacunación a los escolares. Ante esta situación, el ministro de Educación, Édgar Pary, dijo que el inicio de las labores escolares se realizará de forma virtual en las nueve capitales ante el incremento de casos de la covid.

“La educación a distancia fracasó porque muchos estudiantes no tienen recursos para comprar megas y equipos. Ya son dos años que no lograron resolver estos problemas”, dijo a Página Siete Franklin Gutiérrez, presidente de la Junta Nacional de Padres de Familia de unidades educativas públicas.

Gutiérrez indicó que muchos niños y jóvenes dejaron el colegio porque no tienen recursos para las clases virtuales.

Con una postura similar, José Luis Álvarez, representante del magisterio urbano de La Paz, advirtió que con las clases a distancia (virtuales), muchos estudiantes que no tienen recursos económicos corren el riesgo de quedar marginados del proceso educativo.

Según Álvarez, en el caso de las clases presenciales o semipresenciales, las aulas no cuentan con las medidas de bioseguridad adecuadas. “Esta situación convierte a las aulas en focos de contagio”, explicó.

En varios municipios del país, las clases se aplicarán de forma presencial. Tal es el caso de El Alto. Sin embargo, el representante del magisterio alteño, Álex Morales, advirtió que las unidades educativas no están en condiciones de recibir a los estudiantes, además no cuentan con las medidas de bioseguridad.

Según Andrés Huayta, secretario ejecutivo de la Confederación Nacional de Maestros de Educación Rural de Bolivia, las autoridades deben dar las condiciones materiales para volver a las aulas. “Pedimos que el Estado, los gobiernos departamentales y municipales se encarguen de equipar con todos los insumos de bioseguridad a todas las unidades educativas del país”, dijo e indicó que el sector no quiere tropezar con los mismos problemas del año pasado.

“Hay varios gobiernos municipales que han escuchado nuestros pedidos y han dotado los barbijos y alcohol en gel. Pero, muchas alcaldías -la gran mayoría- no lo hacen porque no tienen presupuesto”, aseguró Huayta y dijo que el sector pidió al Gobierno nacional entregar un fondo especial para educación a los municipios que no cuentan con dinero.

Una baja cifra de vacunación

Hasta el sábado, el 60% de los estudiantes de cinco a 17 años de edad no recibió ninguna dosis de la vacuna contra la covid. Especialistas advirtieron que este porcentaje es bajo.

Las proyecciones del Instituto Nacional de Estadística (INE) al 2021 dan cuenta que en Bolivia viven 3.037.837 niños y adolescentes de cinco a 17 años. Según el reporte de la vacunación del Ministerio de Salud, hasta el sábado, en el país se inmunizaron 1.219.589 menores de ese mismo rango de edad, es decir que un 40% de los estudiantes recibieron la primera dosis.

Además, el reporte da cuenta que la segunda dosis alcanzó a un poco más de medio millón de estudiantes, es decir que sólo el 18,5% concluyó el esquema completo de inmunización.

La campaña de inmunización a los estudiantes de cinco a 17 años en el país se inició hace ocho meses.

Según Guillermo Cuentas, exministro de Salud, “la primera dosis no es un esquema completo y un 38% es una cifra muy baja para este grupo etario”, dijo.

Para las autoridades de salud, el riesgo del incremento de contagios es la principal preocupación. El director de Epidemiología del Servicio Departamental de Salud (Sedes) de La Paz, Miguel Ángel Quispe, explicó que en este momento no es recomendable el inicio de las clases presenciales tanto en el área urbana como rural.

Advirtió que en la cuarta ola este departamento registró un incremento de contagios en los niños. Por ejemplo, antes, en una semana, reportaba cuatro casos, ahora llegan a 30.

Nivel académico

Una de las principales preocupaciones de los papás es la situación del nivel académico porque en el año 2020, los estudiantes prácticamente no pasaron clases por la clausura adelantada de la gestión y en 2021 la modalidad virtual no funcionó por la falta de conexión a internet y la carencia de equipos.

“No hay que olvidar que hubo una pérdida de casi tres años y eso es irreparable. Nuestros hijos -principalmente los bachilleres y los que están ingresando a primaria- son los más perjudicados”, explicó Gutiérrez, el máximo representante de los padres de familia.

Los antecedentes

2019 Los conflictos sociales por los que atravesó el país en 2019 provocaron que los estudiantes pierdan al menos un mes de clases en las unidades educativas.

2020 En marzo de ese año ingresó a Bolivia por primera vez la pandemia del coronavirus. Por eso, las autoridades nacionales declararon emergencia sanitaria y el confinamiento en todo el país, por lo que los estudiantes no acudieron a las aulas. Hubo muchos tropiezos por adaptar las clases virtuales.

2021 Hubo tres modalidades: presenciales, semipresenciales y a distancia. En área urbana se impuso la última.

Pagina Siete.