Gran despliegue de policías y militares avanza hacia Sayari para desbloquear carretera al occidente

• Efectivos policiales y militares se movilizan en un operativo de alto riesgo, mientras la tensión crece en la zona tras 10 días de protestas

En medio de un clima de extrema tensión, un masivo contingente de seguridad inició su avance en horas de la madrugada hacia Sayari, uno de los puntos más críticos de la carretera que conecta el occidente del país. Más de 20 buses, camionetas y patrullas transportan a cientos de policías, quienes ya han atravesado la localidad de Parotani como parte de un plan para restablecer el orden en la vía.

Según fuentes oficiales, el operativo cuenta también con el respaldo de efectivos militares, que ingresarán por una ruta alterna para apoyar a la Policía. «El despliegue es preventivo y busca garantizar la seguridad de todos», mencionó el comandante departamental en declaraciones extraoficiales, añadiendo que la prensa solo podrá acceder al lugar una vez asegurada la zona.

La caravana de vehículos, observada durante la cobertura, refleja la magnitud de la intervención. El objetivo principal es despejar los bloqueos, que por décimo día consecutivo paralizan Cochabamba, afectando el transporte de bienes y servicios. Sin embargo, la tarea no será fácil: manifestantes han utilizado explosivos artesanales, como dinamita y petardos, para resistir operativos anteriores, elevando el riesgo de enfrentamientos.

«Lo último que queremos es una escalada de violencia», destacó una periodista en el lugar. «La prioridad es el diálogo, pero también hacer cumplir la ley». Las autoridades han reiterado su disposición a negociar, aunque no descartan medidas más firmes si la situación no se resuelve pronto.

Con la economía regional golpeada y el malestar social en aumento, este operativo podría definir el curso del conflicto en las próximas horas. La mirada está puesta en Sayari, donde la paz y la libre circulación dependen de una solución urgente.