Esposa de juez detenido denuncia que su esposo fue ‘utilizado por personas de alto nivel del Gobierno’

• Jesenia Requena exige que su cónyuge declare ampliatoriamente y revela que poseen «pruebas contundentes» de presiones políticas.

La esposa del juez de Coroico investigado por suspender la credencial de la magistrada electa del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Fanny Coaquira Rodríguez, denunció este domingo irregularidades en el proceso judicial y aseguró que su esposo fue manipulado por figuras poderosas. «Tenemos pruebas contundentes de que mi esposo ha sido utilizado por personas de alto nivel, nivel Gobierno», declaró Jesenia Requena en un emotivo llamado a las autoridades.

Requena afirmó que, pese a las promesas de las autoridades, a su esposo no se le ha permitido rendir su declaración ampliatoria, crucial para esclarecer los hechos. «Nos dijeron que declararía a las nueve de la mañana, pero hasta las 15:30 no hubo avances», criticó. Además, reveló que su familia está siendo amenazada y teme que las pruebas en su poder desaparezcan. «Mi esposo y mi familia corren riesgo. Quieren que las pruebas se pierdan», alertó.

La mujer insistió en que su cónyuge actuó bajo órdenes superiores. «Ha sido utilizado porque recibió instrucciones desde arriba. Esto es un problema de poder, no de dinero», recalcó, sin especificar nombres. Sin embargo, prometió que «en las pruebas que tenemos están claramente identificados los responsables», aunque pidió paciencia hasta que el juez pueda declarar formalmente.

El magistrado fue detenido y enviado a la cárcel de San Pedro por seis meses, acusado de emitir una resolución «extra petita» que suspendió la credencial de Coaquira, lo que habilitó a su suplente. El presidente del Consejo de la Magistratura, Manuel Baptista, confirmó que el juez enfrenta cargos por presunto prevaricato en flagrancia.

Mientras la tensión judicial y política aumenta, Requena hizo un último llamado: «Ayuden a mi esposo, que ha sido víctima de este sistema. Cuando declare, se sabrá toda la verdad». El caso sigue bajo investigación, en medio de acusaciones que podrían revelar maniobras de alto nivel en el poder judicial boliviano.

Con datos de UNITEL