ANPB exige el cese de la violencia contra periodistas en medio de bloqueos y movilizaciones evistas

  • La Asociación Nacional de Periodistas denuncia agresiones, amenazas y un clima de hostilidad hacia la prensa durante coberturas en carreteras como la de Laja.

La Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB), junto a las nueve asociaciones departamentales, ha alzado su voz para exigir el fin de las agresiones, intimidaciones y amenazas contra comunicadores que cubren las protestas y bloqueos impulsados por sectores afines al expresidente Evo Morales. En un comunicado urgente, la organización denunció que, en los últimos días, se ha recrudecido la estigmatización y la difusión de mensajes violentos en redes sociales dirigidos contra medios y profesionales de la prensa.

Prensa Libre

El clima de tensión, alimentado por los bloqueos, ha derivado en ataques físicos y verbales contra periodistas, especialmente durante la cobertura de los cortes en la carretera a Laja, donde varios comunicadores fueron increpados y agredidos. Además, se han registrado amenazas de toma y destrucción de medios de comunicación, acciones que vulneran la libertad de prensa y el derecho de la sociedad a estar informada.

«La violencia no solo pone en riesgo la integridad de los periodistas, sino que atenta contra la democracia», señaló la ANPB. La organización alertó que estas agresiones responden a una estrategia orquestada desde sectores evistas para obstaculizar la cobertura de sus movilizaciones, promover la desinformación y debilitar la credibilidad de la prensa independiente.

La ANPB también hizo un llamado al Gobierno nacional para que garantice la seguridad de los periodistas en conflictos sociales, investigue los hechos de violencia y sancione a los responsables. Asimismo, instó a los propietarios de medios y líderes de iniciativas periodísticas a implementar protocolos de protección para sus equipos en terreno.

«Reafirmamos nuestro compromiso con la democracia y la libertad de expresión», concluyó el comunicado, exigiendo a los actores políticos y sociales rechazar la incitación al odio y priorizar el diálogo como salida a la crisis. La defensa de la prensa libre, subrayaron, es esencial para preservar los derechos fundamentales en Bolivia.