
Rafael Quispe alerta sobre una crisis política comparable a 2003 y 2019: “El sistema está al borde del colapso”
El exdiputado advirtió que Bolivia enfrenta una coyuntura de alta tensión social y política, con un Movimiento al Socialismo fracturado y una oposición sin liderazgo. Plantea que, si no se corrigen los errores, podría desatarse una nueva crisis de magnitud histórica.
El exdiputado Rafael Quispe advirtió este miércoles que Bolivia atraviesa una situación política crítica, con similitudes alarmantes a los periodos de inestabilidad vividos en 2003 y 2019, momentos que antecedieron a convulsiones sociales y cambios abruptos de poder. En su criterio, el actual desgaste del sistema político podría derivar en una nueva crisis si no se atienden las señales de deterioro institucional.

“La falta de legitimidad interna y el alejamiento de las bases podrían llevar al MAS a una situación límite, incluso al extremo de perder su personería jurídica”, afirmó Quispe, quien ha sido una voz crítica del oficialismo y de la falta de renovación dentro del espectro político nacional.
Según su análisis, el partido gobernante, el Movimiento al Socialismo (MAS), enfrenta una fractura interna significativa. Aseguró que el “voto de identidad” dentro de la izquierda ya no respalda al bloque renovador ni a figuras como el ministro de Gobierno Eduardo del Castillo, y estaría migrando hacia el actual presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, lo que deja al oficialismo dividido y debilitado.
Quispe también alertó sobre la falta de liderazgo claro en la vereda opositora. “No hay una figura política sólida que pueda enfrentar al MAS en las próximas elecciones. La oposición sigue dispersa y sin rumbo”, dijo. Esta combinación de un oficialismo dividido y una oposición desorganizada, según el exdiputado, abre las puertas a un escenario electoral incierto y potencialmente conflictivo.
Finalmente, Quispe hizo un llamado a la ciudadanía y a los actores políticos a tomar conciencia del momento histórico que vive el país: “Si no hay correcciones profundas, nos encaminamos hacia una crisis mayor que las anteriores”.