El dolor por sus quemaduras de primer y segundo grado pasó a segundo plano. La noticia que recibió le rompió el corazón. La señora a la que Carlos Arias ayudó en un incendio, el miércoles por la tarde, murió ayer. “Eso es lo más duro que estamos viviendo”, se lamentó Evelín Antelo, esposa del exfutbolista. Él sufrió un accidente en uno de los restaurantes de la cadena de pollos que administra.
En menos de nueve meses, Arias vivió su tercera “prueba difícil”. En abril de 2021 superó la Covid-19 que lo llevó a terapia intensiva. El 30 de diciembre pasado venció al virus, por segunda vez. “Ahora nos tocó nuevamente esta prueba difícil”, se resignó Antelo.
El hecho ocurrió el miércoles, aproximadamente a las 13:30, cuando Arias intentó salvar a una de sus trabajadoras. Según el relato de su esposa, Arias ingresó a la cocina del negocio, trató de auxiliar a una de las cocineras, pero fue sorprendido por la explosión de una garrafa. El exgolero y la mujer fueron afectados y ambos fueron trasladados a un hospital.
“Lamentablemente hubo un accidente en una de las sucursales del restaurante que tenemos en Santa Cruz, él por ayudar en la manipulación de una garrafa de gas, lamentablemente hubo una fuga de gas y él fue afectado”, relató Antelo.
Arias se recupera en la Caja Petrolera cruceña. “Él está estable, está consciente, está siendo atendido. A Dios gracias está siendo tratado, en un proceso difícil, del que vamos a salir. Está estable, sus signos vitales siempre estuvieron bien”, aclaró.
El dolor del Pollo
Pese a lo sucedido, Arias estaba con buen ánimo. Pero su semblante cambió cuando preguntó por el estado de salud de la señora que ayudó. “Estaba bajoneado por lo que le pasó a la señora, que ya no está con nosotros”, contó la cónyuge del exguardameta que jugó en Bolívar, The Strongest, Blooming y la Selección boliviana de fútbol.
“La muerte de la señora es lo más duro que estamos viviendo. Ella era una trabajadora excepcional. Este restaurante es nuevo. Llevábamos seis meses y ella era parte del emprendimiento que tenemos. Ahora estamos atendiendo el requerimiento de su familia”, explicó.
Ayuda
“Estamos con seguro de la Caja Petrolera, los gatos que estamos teniendo son con las familias de los trabajadores que fueron afectados. Quiero agradecer a la gente que nos ayuda. La ayuda económica es importante. Muchísimas gracias. Esas cuentas en las que se pide la colaboración de la gente son de amistades cercanas”, explicó.
Página Siete