No llegaron solicitudes de ayuda y boliviano dice que Ucrania necesita apoyo del mundo
El Ministerio de Relaciones Exteriores informó que atiende a los connacionales bolivianos que requieran asistencia tras la escalada de violencia del conflicto en Ucrania, empero que hasta ayer no registraron ninguna solicitud. El boliviano Luis Alberto Flores Posternak, que vive en Kiev, buscó junto a su familia un refugio en el campo y desde el encierro dijo que el país en el que vive necesita apoyo del mundo.
“Estamos actualizando constantemente la información sobre bolivianos en Ucrania y canalizando el apoyo que sea requerido. Aunque hasta el momento no se ha solicitado ningún tipo de asistencia, estamos muy atentos y alertas a cualquier requerimiento”, explicó la viceministra de Gestión Institucional y Consular, Eva Chuquimia, según una nota de prensa oficial.
Asimismo, refiere que las autoridades consulares de las Cancillerías de la región ya han sostenido reuniones de coordinación para intercambiar criterios y sumar esfuerzos, de esta manera, las y los bolivianos que así lo soliciten tendrán apoyo y asistencia en el terreno.
La viceministra además apuntó que la Dirección General de Asuntos Consulares (DGAC) habilitó desde el 24 de febrero varios canales de comunicación para poder informar de manera rápida y efectiva a los connacionales que se encuentren en Ucrania. Según el último reporte de la DGAC se tiene un registro aproximado de 76 bolivianas y bolivianos que residen en el país.
“La habilitación de las líneas informativas para asistencia que trabajan las 24 horas nos están facilitando la coordinación con los bolivianos que viven en Ucrania, gracias a esta vía podemos tener un contacto cercano y permanente con nuestra comunidad”, recalcó.
La viceministra reiteró que por el momento no se han reportado situaciones de gravedad que comprometan la seguridad de ningún connacional, siendo una de las principales recomendaciones en este momento no exponerse, ni movilizarse en vías públicas y mantenerse en lugares seguros. Citan el número de contacto de WhatsApp y Telegram: +59172015214
BOLIVIANO PIDE AYUDA
Por otro lado, el boliviano Luis Alberto Flores Posternak, que vive en Kiev, capital de Ucrania, buscó junto a su familia un refugio en el campo y desde el encierro dijo que el país en el que vive necesita apoyo del mundo.
En una entrevista con Unitel, Flores dijo que es de madre ucraniana y que vive hace 17 años en Kiev, la ciudad más grande de Ucrania; es instructor de artes marciales. Además de él hay otros bolivianos en este país, pero también colombianos, venezolanos y argentinos, con los que se mantiene en contacto.
“Ucrania necesita el apoyo del mundo, ese es mi mensaje, necesitamos el apoyo del mundo”, reiteró en entrevista con Unitel. Subió videos en su cuenta de Facebook en los que habla y muestra la invasión de Rusia a Ucrania.
Pidió “filtrar” la información que se muestra al mundo, porque sí hay una guerra en la que matan a civiles. “El primer día estaban matando a los militares, al segundo día están disparando a cualquier lugar”.
Lo que hace la gente es buscar refugios y sobrevivir a las bombas. En Kiev, cerraron los bancos, farmacias y supermercados. “En mi barrio hay tanques, la gente está peleando en la calle, el alcalde tomó la metralleta y Salió a la calle a defender la ciudad, al igual que todos nosotros estamos tratando de defendernos”, relató.
En Ucrania, el toque de sirenas alerta una lluvia de misiles y ante estos sonidos la gente se refugia en la estación de trenes. La sala de artes marciales, en la que daba clases Luis Alberto Flores, se convirtió en un espacio de albergue para los ucranianos.
Según el instructor, su familia se adapta “poco a poco” al refugio y cuando escucha las sirenas, baja al sótano para mayor seguridad como lo hizo el viernes que bajó en dos oportunidades por los ataques aéreos.
Lo que a Flores Posternak le preocupa es el abastecimiento de alimentos y el servicio de comunicación, de hecho, el puente que conectaba a la ciudad de Kiev fue destrozada por los bombardeos.
“Todo este barrio, no diré donde, está cerrado, no tenemos ya comida, ni nada, ya se está acabando la comida en el supermercado no se sabe cuándo va a llegar; si nos cortan la electricidad estamos fregados (…) pero sí tenemos línea telefónica”, dijo.
El Diario.