Bloqueos «evistas»: Crisis económica, escasez y millonarias pérdidas en el sector productivo
Las medidas de presión organizadas por sectores afines a Evo Morales paralizan al país y causan pérdidas millonarias, afectando la economía nacional y dejando a productores en la quiebra
Domingo, 3 de noviembre de 2024 (FmBolivia).- La crisis por los bloqueos en Bolivia ha generado un panorama caótico: productos perecederos como frutas, verduras, carne y pollos se descomponen en medio de las carreteras, mientras productores y transportistas expresan su impotencia. Según estimaciones oficiales, hasta el día 17, las pérdidas ascienden a 1.700 millones de dólares, equivalentes al 4% del PIB nacional. Dependiendo del sector, la recuperación podría extenderse entre ocho meses y hasta tres años.
Daño económico devastador en el sector productivo
El Ministerio de Economía y Finanzas destaca que la cadena de suministro, especialmente para productos perecederos, enfrenta daños irreparables. La producción agropecuaria es de las más afectadas, ya que miles de toneladas de alimentos deben desecharse en los puntos de bloqueo o en sus centros de producción, generando enormes pérdidas en productos como leche, frutas y hortalizas. Además, el sector avícola, porcicultor y floricultor reportan pérdidas cuantiosas, con insumos retenidos y mercancías sin posibilidad de transporte.
El sector exportador también sufre graves consecuencias. La suspensión del transporte de productos como la soya y otros derivados amenaza la credibilidad del país en mercados internacionales. También los productores de carne y banano han visto reducida su capacidad de exportación, disminuyendo el ingreso de divisas.
«Colapso económico» y pérdida de empleos
Pablo Camacho, presidente de la Cámara Nacional de Industria (CNI), describió la situación como un “colapso económico”. Las industrias en el país registran pérdidas superiores a los 9.000 millones de bolivianos, poniendo en riesgo cerca de 600.000 empleos y afectando gravemente a más de 39.000 industrias formales. Muchas empresas han tenido que reducir drásticamente su producción o paralizar sus operaciones por falta de insumos y la imposibilidad de trasladar productos esenciales, afectando sectores como la industria farmacéutica y el exportador.
Camacho resaltó que la imagen de Bolivia en el extranjero se deteriora a medida que se incumplen contratos y el país pierde competitividad en mercados clave. La falta de ingresos y las obligaciones financieras —incluyendo sueldos, aguinaldos y pagos bancarios— suman presión a las empresas, algunas de las cuales ya han detenido sus operaciones en regiones como Cochabamba.
El clamor por reformas y la necesidad de una ley anti-bloqueo
Ante esta situación crítica, la Cámara Nacional de Industria insta a la Asamblea Legislativa a implementar reformas que garanticen la recuperación económica y eviten que el país vuelva a enfrentar situaciones similares. Las propuestas incluyen una nueva ley de inversión, un código tributario actualizado y una modernización de la ley general del trabajo, que data de 1939. También solicitan una “ley anti-bloqueo” que asegure la libre circulación y evite que conflictos sociales perjudiquen la economía, tomando como ejemplo las regulaciones en Argentina, donde no se permite la interrupción de la actividad económica.
Cochabamba: una economía paralizada y desabastecimiento de alimentos
Rolando Morales, presidente de la Cámara Agropecuaria de Cochabamba, informó que los bloqueos han paralizado completamente la economía del departamento. Cochabamba, un punto clave para el transporte de alimentos, se encuentra aislada, lo que ha impedido la movilización de productos básicos, generando desabastecimiento y un alza de precios en el mercado local. Morales indicó que más de 400.000 familias dependen del agro, y muchas ya han sufrido despidos como resultado de la interrupción de las actividades.
Inflación y deterioro de la economía nacional
El Centro Boliviano de Estudios Económicos (CEBEC), dependiente de Cainco, advirtió que la interrupción en el transporte y la distribución de mercancías no solo afecta la disponibilidad de productos, sino que incrementa la inflación. En algunas regiones, el precio de alimentos como el arroz ha subido más del 30% en tan solo dos semanas. Además, la entidad explicó que empresas de transporte enfrentan pérdidas por redirigir rutas o por asumir la pérdida de productos perecederos.
Frente a esta crisis, los especialistas consideran que la recuperación económica tomará tiempo y requerirá una reorganización integral en la logística y planificación empresarial, un esfuerzo que podría haberse destinado al desarrollo productivo y la mejora económica del país.