Movilización juvenil en defensa de Chiquitania y medioambiente
Más de trescientos adolescentes y jóvenes, entre mujeres y varones, simpatizantes del movimiento mundial “Viernes por un futuro” iniciaron una semana de actividades de protesta y concienciación social en defensa de la Chiquitania, del Amazonas y del medioambiente del planeta, en contra del cambio climático y los gobiernos del mundo que no toman acciones para preservar a la naturaleza, salvar a la Madre Tierra y el futuro en el cual a ellos les tocará vivir en un planeta del que muy pronto ellos se harán cargo.
En la ciudad de La Paz, esta fue la jornada más fuerte en lo que concierne a la movilización conocida como “Viernes por un futuro”, movimiento creado e inspirado por la adolescente sueca de 16 años, Greta Thunberg.
La manifestación de los adolescentes y jóvenes paceños se inició en cercanías al Palacio Legislativo, donde los jóvenes tenían planificado realizar una “sentada” como primer acto de protesta; sin embargo, uniformados de la Policía les negaron el ingreso al lugar a través de cercos y cordones de seguridad que establecieron en el perímetro de la Plaza Murillo. De esa forma, el grupo de protestantes decidió continuar su marcha hacia la avenida Mariscal Santa Cruz.
Los cánticos se elevaron de tono en las voces de los jóvenes y se hicieron sentir en los transeúntes, muchos de los cuales de detenían para aplaudir a los manifestantes que entonaban: “¡Ni soya, ni coca! ¡El bosque no se toca!”, “¡Queremos solución, no contaminación!”, añadieron.
Grupos rezagados de jóvenes empezaron a llegar para sumarse a la columna y pronto al arribar al final del paseo de El Prado, tomaron rumbo al frontis del Ministerio de Justicia, donde una de las representantes, Adriana Salazar y el resto de jóvenes dijeron”: “¡Le decimos al Ministerio de Justicia y al Estado ¡No tenemos planeta B!”, además de “¡Pachamama, no te cuidan no te aman!”.
Salazar aclaró que su expresión y reclamos no buscaban enfrentamiento con las fuerzas policiales que custodiaban el citado ministerio, que era un movimiento pacífico que buscaba hacer reflexionar a toda la población y autoridades que aún se pueden tomar acciones que eviten la contaminación del planeta y la elevación de la temperatura del mismo, porque de lo contrario la humanidad se extinguirá. “¡No habrá dinero en un planeta muerto!”, gritaron a voz en cuello adolescentes y jóvenes.
“Estamos al borde de que suba la temperatura a 1.5 grados el planeta será inevitable y estamos al borde de ello, Bolivia es uno de los países que más deforesta. Ya tenemos el trofeo de ser la nación que ha quemado sus bosques. Exigimos que se declare desastre nacional y no se comercialice las tierras de la Chiquitania. Exigimos un futuro para nuestros hijos, en un futuro sin alimento, ni oxígeno”, declaró a los medios de comunicación, el joven activista Sergio Lima.
El punto culminante de la agenda de actividades del movimiento juvenil, fue realizar una “alfombra Humana” en los dos carriles de tránsito que existen en la avenida Villazón, antes de llegar a la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), los jóvenes se echaron durante diez minutos en el piso para simbolizar que esa generación de personas morirá si las condiciones del medio ambiente mundial no se cambian. Luego el tránsito vehicular fue reestablecido.
“La juventud tiene conciencia de lo que está pasando, es una semana de protestas que se inicia a nivel global, una movilización, una huelga masiva”, añadió Salazar al anunciar que el día viernes 27 de septiembre la participación juvenil en este movimiento será aún más masiva con un paro. La líder invitó a toda la población a sumarse, porque todos serán víctimas del daño al medioambiente.
El Diario