Siete enviados a prisión por violencia en Llallagua; hay menores implicados y Bs 100.000 en efectivo

Fiscalía investiga si el dinero incautado era para pagar a bloqueadores; un dirigente ayllu también fue encarcelado.

En el marco de las investigaciones por los hechos violentos registrados en Llallagua, al norte de Potosí, ocho personas fueron aprehendidas, de las cuales siete recibieron detención preventiva por cinco meses. Entre los detenidos se encuentran tres menores de edad, mientras que un adulto mayor de 70 años recibió detención domiciliaria por su estado de salud.

Prensa Libre

Entre los aprehendidos figura también un dirigente ayllu, identificado como Rubén M. J., delegado de los ayllus de la provincia Rafael Bustillo, quien fue enviado a la cárcel de San Pedro (Oruro), acusado de tentativa de homicidio, lesiones graves y deterioro de bienes del Estado.

El día de la emboscada, el 12 de junio, tres policías y un estudiante murieron tras ataques de bloqueadores afines a Evo Morales, quienes exigen su inscripción como candidato presidencial pese a estar constitucionalmente inhabilitado.

Según la Fiscalía de Oruro, varios detenidos portaban explosivos y armamento ilegal, mientras que se encontró en poder de algunos cerca de Bs 100.000, monto que se presume era destinado a financiar los bloqueos.

El fiscal Aldo Morales detalló que tres adolescentes de 15 y 17 años fueron enviados al centro de reclusión Renacer por portar explosivos. Otros cuatro adultos fueron remitidos a la cárcel de San Pedro, mientras que un hombre de 70 años, identificado como Leocadio T. Ch., recibió detención domiciliaria.

Por su parte, el fiscal de Potosí, Gonzalo Aparicio, informó que otros cuatro menores también están aprehendidos y serán sometidos a audiencias. Aseguró que el dirigente Rubén M. J. fue reconocido por testigos como instigador de los ataques del 11 y 12 de junio.

Las investigaciones continúan para identificar a los autores materiales e intelectuales, recuperar las armas utilizadas y establecer el grado de financiamiento organizado detrás de los disturbios.