¿Cómo lograron la inmunidad colectiva 3 municipios que ahora respiran en paz?
Puerto Suárez, Puerto Quijarro y El Carmen Rivero Torres son los primeros municipios del departamento de Santa Cruz y del país que lograron alcanzar la inmunidad colectiva. En la actualidad, las tres poblaciones tienen más del 90% de su población vacunada y ahora respiran con más tranquilidad ante la pandemia de la Covid-19.
En los tres municipios, los pobladores ya realizan casi todas sus actividades con normalidad, ya pueden asistir a encuentros deportivos y sociales, pero con todas las medidas de bioseguridad y la presentación del carnet de vacunación. Además, las poblaciones reportan una reducción de casos de la Covid-19.
¿Cómo lograron ese objetivo? Las autoridades locales de los tres municipios cruceños contaron que adoptaron diferentes estrategias para conseguir que más gente se sume a la inoculación, las medidas van desde la formación de brigadas para ir casa por casa e informar sobre los beneficios de la vacunación, hasta realizar una búsqueda activa de la gente que aún no recibía las dosis.
Al principio, según las autoridades, impulsar el proceso de vacunación no fue fácil porque mucha gente tenía miedo a causa de la desinformación que fue difundida en las redes sociales.
El alcalde de Puerto Suárez, Mauricio Montero, contó a Página Siete que en ese municipio las mujeres eran las que más rechazaban la vacuna porque tenían conocimiento de una información falsa y equivocada que fue propagada en las redes.
“Temían que las dosis les puedan provocar infertilidad”, recordó. Ante esa situación, la comuna contrató personal para realizar visitas zona por zona y buscar a la gente para dar información y poner las dosis.
En El Carmen Rivero Torres, su alcaldesa, Celvy Orellana, declaró que en muchas comunidades del municipio la gente rechazaba la vacuna y la municipalidad decidió ir hasta esas poblaciones para dar información.
En el municipio de Puerto Quijarro se optó por llevar la vacuna a cada una de las zonas de la localidad. Su alcalde, Luis Chamby, dijo que la gente se conscientizó por la presencia de la variante P1 y por eso se alcanzó el 90% de inmunización.
Los tres municipios lograron inocular a su población en junio, cuando comenzaron a llegar las vacunas al país y en plena tercera ola de la pandemia.
El jefe de epidemiología del Ministerio de Salud, Freddy Armijo, aseguró que pese a lograr la inmunidad colectiva, los municipios aún no deben bajar la guardia y la gente todavía debe continuar con el uso de las medidas de bioseguridad.
“La vacuna sólo protege de la enfermedad grave, pero aún continúa el virus circulando entre nosotros. Por eso es importante que la población mantenga su protección y no se exponga demasiado”, indicó Armijo.
En Puerto Suárez se aplicaron tres estrategias y la gente hoy hace sus actividades casi con normalidad
El municipio de Puerto Suárez ya llegó a más del 85% de inmunización en su población mayor a 18 años gracias a tres estrategias: la búsqueda de personas que no se vacunaron barrio por barrio, la difusión de mayor información en redes sociales y medios de comunicación, y las restricciones.
El alcalde del municipio, Mauricio Montero, contó que cuando comenzó la vacunación en el país de forma masiva, la gente no quería vacunarse y Puerto Suárez tenía el menor porcentaje de inmunizados. Y por eso, las autoridades comenzaron a buscar estrategias para mejorar los datos. La primera medida fue el despliegue de brigadas de médicos a todos los barrios y comunidades del municipio. “En cada uno de los barrios el personal convocaba a los vecinos y les daba información sobre la vacuna. Luego, muchos decidieron recibir las dosis”, explicó.
“La verdad, la gente era reacia a acceder a la vacuna, era un tema muy delicado porque sabíamos que por ley la inmunización no es obligación. Por eso decidimos (como segunda estrategia) asumir restricciones y a la gente no le gustaba porque tenía que hacer sus actividades, porque la mayoría vive del comercio”, dijo Montero.
Con esta medida se pidió a la gente que se vacune porque era la única forma para levantar las restricciones.
“¿A quién le gusta estar encerrado, sin poder acceder a sus actividades económicas, deportivas y otros?”, dijo.
Montero aseguró que esas restricciones ayudaron a que la gente tome conciencia y acuda a vacunarse “Se fueron levantando algunas restricciones a medida que hubo menos personas con sospecha de Covid-19”, apuntó.
Como tercera estrategia, la municipalidad elaboró materiales para informar sobre los beneficios de recibir la vacuna y descartar los mitos.
Hace dos semanas, Puerto Suárez logró alcanzar el 70% de vacunación y consiguió la inmunidad colectiva.
“En la actualidad ya hemos alcanzado el 85% de inmunidad”, dijo Montero y aseguró que ahora la población del municipio realiza sus actividades casi con normalidad.
“La gente necesita afecto y ser reconocida por los familiares, por eso comparte, visita y da abrazos”, manifestó.
Aclaró que “aún la población continúa con las medidas de bioseguridad, es decir el uso del barbijo, el lavado de las manos y el distanciamiento social, porque “de lo único que libera la vacuna es de que la enfermedad no sea grave”.
Aseguró que gracias a la vacuna en tres meses de más de 300 sospechosos, 53 dieron positivo. Indicó que la mayoría de los enfermos no recibieron la vacuna. Contó que hubo algunas personas que se contagiaron, recibieron las dosis y pasaron la enfermedad de forma leve.
Con apoyo de la gente, Puerto Quijarro vacunó al 90% de su población mayor de 18 años
En el municipio cruceño de Puerto Quijarro se vivió una situación diferente. Según el jefe del área de comunicación, Edson Montaño, en la localidad la gente acudió a los puntos de vacunación de manera oportuna.
“Comenzamos a vacunar cuando se inició la tercera ola y la inmunización se abrió para toda la población mayor de 18 años de edad porque estamos en un municipio fronterizo con Brasil, donde se generó la variante P1 y la gente acudió de forma masiva”, indicó.
Pero hubo un grupo de la población que por creencias religiosas y mitos no recibió la vacuna. Con este grupo se trabajó con una estrategia. “Se lanzó una campaña de comunicación virtual sobre inmunización”, dijo y contó que la campaña no fue muy grande, pero sí se logró avanzar con la inoculación en la población.
Ahora, la directora del Centro de Salud, Mari Araque, indicó que la vacunación llegó al 90% de la población vacunable. “Ayudó mucho el conflicto que hubo al inicio del año por el ingreso de la variante P1, esa situación hizo que la población se concientice y reciba las dosis”, indicó.
De acuerdo con Montaño, cuando ingresó la nueva autoridad municipal, en mayo pasado, el municipio tenía un centro de salud integral “muy descuidado” y pese a las carencias, se logró mejorar la cobertura de inmunización. “Pedimos ayuda al Gobierno central y con eso tratamos de cubrir las necesidades básicas”, sostuvo.
Y se alcanzó el 70%, después el 80. Mucha gente esperó la llegada de la vacuna Janssen de Johnson & Johnson y con “este lote ahora se llegó al 90%”.
En la actualidad, existe un porcentaje de un 10% de personas que no recibieron las dosis y son principalmente mujeres y personas con enfermedades de base, según las autoridades.
“En el caso de las mujeres, ellas creen que si se vacunan serán estériles, ya que la dosis hará que no tengan hijos. Respecto a las personas con enfermedades de base, como diabetes e hipertensión, ellas creen que el inoculante les podría provocar un paro cardiaco. Ambas cosas son completamente falsas”, dijo Montaño.
La funcionaria de salud aseguró que ahora se continuará con información para que esas pocas personas que faltan puedan vacunarse.
Debido a ello, el alcalde del municipio, Luis Chamby Montoya, lanzó en pasados días una campaña de vacunación y atención médica para toda la población de Arroyo Concepción. “Queremos llegar al 100% de la vacunación. Pido a la población no descuidarnos, es bien importante (la inoculación) porque caso contrario tendremos problemas en la salud”, dijo.
Aseguró que en los siguientes días se llevará la campaña a otros sectores para vacunar a la población que hasta la fecha no recibió la inoculación.
En El Carmen Rivero Torres, la alcaldesa lideró las tareas de vacunación barrio por barrio
En el municipio de El Carmen Rivero Torres, como en la mayoría del territorio nacional, la gente no quería vacunarse. Por eso, este municipio comenzó con una campaña agresiva para lograr la aceptación de la población.
“Cambié al director de salud porque el anterior era flojo y puse a la doctora Velma Hurtado y junto al administrador, Dagner Herrera, hicimos un equipo muy sólido y con experiencia. Así comenzamos la inmunización barrio por barrio”, dijo la alcaldesa de ese municipio, Celvy Orellana.
Se optó también por acudir a las instituciones, como los bancos, la alcaldía y el magisterio, entre otras, para buscar a la gente que estaba en edad vacunable. Así se dio información y muchos decidieron recibir las dosis.
“En ese recorrido hubo poca gente que se negaba”, dijo.
Como otra de las estrategias, la propia alcaldesa lideró los recorridos en las comunidades y compartió su experiencia con los vecinos para que opten por recibir las dosis. “Eso pasó -por ejemplo- en la comunidad de los Ayoreos, donde hablábamos con la gente, le contábamos que no existen efectos adversos graves y aclaramos sus dudas. Por eso, en un principio, en esa comunidad, ninguno recibió la vacuna, pero luego esta población solicitó las dosis para todos los que estaban en edad vacunable y ahora todos están inmunizados”, relató la autoridad.
Aseguró que para esas actividades no se necesitaron muchos recursos y esfuerzos, “pero sí voluntad, el amor a la profesión y la entrega del personal que incluso trabajaba hasta 12 horas diarias”, dijo la alcaldesa que también es bioquímica.
Con el avance de la inmunización, el municipio comenzó a liberar algunas restricciones.
Ahora, este municipio alcanzó un 99% de vacunados según el censo 2012, pero existe un grupo de población que está indocumentada. Ante esa situación, la alcaldía realiza convenios con el Segip para que la gente acceda a un documento de identidad y también a su vacuna. “Estamos conscientizando a la gente de lo importante que es el documento porque tienen bastantes beneficios, pero también porque así se podrá vacunar”, aseguró.
La población ya comenzó a tener una “nueva normalidad” y ya participa en campeonatos de fútbol, siempre y cuando todos los participantes presenten su certificado de vacunación. Además, los jóvenes acuden a una fiesta con su documento en mano. La gente debe continuar con el uso del barbijo y el lavado de manos constante para evitar contagios porque el virus continúa circulando. La autoridad aseguró que de julio a la fecha, el municipio ya no registró casos de Covid-19.
Pagina Siete.