- El empresario y político boliviano busca liderar la oposición de cara a las elecciones generales de 2025, apostando por la experiencia y un cambio de modelo económico.
Samuel Doria Medina, conocido empresario y figura política, ha decidido regresar al escenario político boliviano tras varios años de pausa. Con la mirada puesta en las elecciones generales de 2025, ha anunciado su precandidatura presentando un plan anticrisis basado en un modelo de “capitalismo con rostro humano”, que prioriza el emprendimiento, la reducción del tamaño del Estado y un enfoque en educación y salud.
Doria Medina, quien fuera ministro de Planificación entre 1991 y 1993, además de candidato a la presidencia y vicepresidencia en elecciones anteriores, asegura que el contexto actual exige experiencia en el manejo del Estado. “La principal preocupación de la gente es la crisis económica, y debe ser atendida con prioridad”, declaró en una entrevista reciente con la ANF.
Un modelo económico alternativo
El empresario destacó que el socialismo del siglo XXI, promovido por el Movimiento al Socialismo (MAS), ha fracasado. Según su visión, “el país necesita un capitalismo que apoye a los sectores de bajos ingresos y que fomente el emprendedurismo como motor de la economía”. Entre sus propuestas se encuentra cerrar empresas estatales ineficientes, permitir mayor participación privada y enfocar los recursos del gas y litio en inversión social.
Doria Medina subrayó que su modelo no implica el desmantelamiento completo del aparato estatal: “Las empresas estratégicas deben permanecer bajo control del Estado, pero no como monopolios. Casos como Entel, donde conviven actores públicos y privados, son ejemplos a seguir”.
Lecciones del pasado y perspectivas hacia 2025
En 2019, Unidad Nacional, su partido, optó por no participar en las elecciones generales para apoyar la candidatura de Carlos Mesa, en un esfuerzo por consolidar la oposición. Sin embargo, los comicios fueron anulados tras denuncias de fraude. En 2020, Doria Medina formó una alianza con Jeanine Áñez, candidatura que terminó retirándose ante la fragmentación del voto opositor.
El político enfatizó que “la unidad será clave para enfrentar al MAS en 2025” y que no busca dividir la oposición. “Si tengo el apoyo necesario, estoy dispuesto a liderar, pero no seré candidato solo por aspiraciones personales”, afirmó.
Medidas inmediatas y retos institucionales
Doria Medina destacó que un nuevo gobierno tendrá una “luna de miel” corta para tomar decisiones contundentes. “Las medidas de shock son imprescindibles para estabilizar la economía, como lo hizo Víctor Paz Estensoro en 1985 con el Decreto 21060”, explicó.
Además, reconoció que será necesario un proceso más largo para recuperar la institucionalidad del país, afectada por años de desinstitucionalización y excesiva politización. “El próximo gobierno deberá priorizar la justicia, la seguridad jurídica y un sistema que fomente la inversión privada”, subrayó.
Un mensaje para los jóvenes
En sus conversaciones con jóvenes, Doria Medina asegura haber encontrado inspiración para regresar al ámbito político. “Mi generación tiene la responsabilidad de demoler lo que no sirve y construir los cimientos de una nueva Bolivia, pero serán los jóvenes quienes edificarán ese futuro”, afirmó.
Con un discurso que busca posicionarse como una alternativa seria y realista frente a la crisis actual, Doria Medina se prepara para disputar el liderazgo de la oposición, confiando en que su experiencia y visión podrán convencer a un electorado cada vez más crítico del modelo vigente.