
- El proyecto, que busca cubrir el 50% de la demanda nacional de hierro, arranca con una producción inicial de 200.000 toneladas anuales y promete duplicar su capacidad en tres años. El presidente Luis Arce encabeza el acto, mientras la oposición cuestiona la viabilidad del proyecto.
Tras años de expectativa y desafíos, este 24 de febrero marca un hito en la historia industrial de Bolivia con la inauguración del Complejo Siderúrgico del Mutún en Puerto Suárez. El proyecto, que arranca con una producción inicial de 200.000 toneladas anuales de barras corrugadas y alambrón, tiene como objetivo cubrir el 50% de la demanda nacional de hierro, reduciendo significativamente las importaciones de acero y ahorrando al país cerca de $us 200 millones anuales.

El presidente Luis Arce estará presente en el acto de inauguración, donde se destacará la importancia de este complejo para la industrialización del país. Alejandro Santos, ministro de Minería, confirmó que a partir de mañana comenzará la producción de fierros corrugados y alambrones, insumos clave para la construcción y la fabricación de subproductos como tuercas, tornillos, clavos y pernos. “Tenemos ya compañeros empresarios listos para comprar y vender en el mercado interno”, aseguró Santos.
El Complejo Siderúrgico del Mutún está conformado por siete plantas: Concentración, Peletización, Reducción Directa del Hierro (DRI), Acería, Laminación, Central Eléctrica y Auxiliares. Además, se proyecta la construcción de una segunda planta en los próximos tres años, con el objetivo de duplicar la producción y abastecer la totalidad del mercado interno, e incluso exportar los excedentes.
Sin embargo, no todo son celebraciones. Desde la oposición, la diputada de Creemos, María Rene Álvarez, cuestionó la viabilidad del proyecto, calificando la inauguración como un “montaje político”. “No cumplen con todos los requisitos técnicos y ni siquiera han podido transparentar el tema del impacto medioambiental ni el suministro del agua”, denunció Álvarez, quien asegura que la industrialización anunciada no se refleja en la práctica.
A pesar de las críticas, el gobierno boliviano insiste en que este complejo siderúrgico es un paso fundamental hacia la autosuficiencia industrial y el desarrollo económico del país. “Este es un día histórico para Bolivia”, afirmó el ministro Santos, quien aseguró que el proyecto no solo generará empleo, sino que también fortalecerá la economía nacional.
Con el Complejo Siderúrgico del Mutún, Bolivia se posiciona como un actor relevante en la producción de hierro en la región, aunque los desafíos técnicos y medioambientales aún están por resolverse. El futuro de este megaproyecto dependerá de su capacidad para cumplir con las expectativas y superar las críticas.