Del ridículo no se vuelve

Juan Domingo Peón, el líder populista más influyente de esta parte del continente dijo alguna vez: «en la política se puede volver de cualquier lugar menos del ridículo»; creo que aquí, en Bolivia, estamos frente a uno de esos casos.

Resulta que: nuestro inefable (que no se puede explicar con palabras) presidente Luis Alberto Arce Catacora ha entrado a ese camino sin retorno, después de haberse presentado en un sitio, previamente elegido; donde él sabía que no lo iban a contradecir (las señoras que hacían el evento no le prestaron atención, entretenidas en el wasap o el acullico) y ahí se largó a argumentar una serie de sinsentidos que cualquiera que sepa de historia sabe que sus argumentos acerca de la escasez de combustibles que azota al país fueron una mentira.

Prensa Libre

Vamos a analizar el soliloquio (en este caso reflexión en voz alta y a rodeado) del presidente:

“Yo quiero recordarles, hermanas, hermanas, porque siempre dicen, ah, pero usted era ministro de economía. Sí, pero no era ministro de hidrocarburos. Han pasado, pues, muchas cosas, hermanas. Muchas cosas”.

Comentario.- Parece que “su excelencia” no se ha enterado que el gabinete ministerial, de cualquier presidente está compuesto por ministerios; estos interactúan entre sí, entonces por oficios y parecidos, además de objetivos, se generan las áreas de gestión, las que pueden ser , Gobierno y Defensa, que la maneja el propio presidente con el min gobierno, apoyado por Defensa y, Justicia (acuérdense de Lima Magne), luego viene Economía y Finanzas; en tiempos de Evo Morales, la cabeza era Luis Alberto Arce Catacora, y está el área de servicios públicos y salud, eso como mínimo.

Esto lo debiera saber muy bien Arce Catacora que fue el superministro de Morales, no sólo que él fue la persona más cercana y de confianza, sino que abarcaba otros espacios; Morales debía estar enterado de “cuánta plata tenía”, “cuánta podía gastar”, si podía “dar u ofrecer bonos”, si le daba para “dar esto, eso o aquello’, de manera que Arce era el encargado de hacer que la maquinaria económica del Estado, generada por el “exceso de plata que dejaba la exportación de gas” no se detenga. Había que satisfacer el populismo repartidor del “presidente viajero” (como le gustaba a Morales que lo llamen). Entonces, no se trata de decir “yo no ministro era de hidrocarburos”: en materia de gobernabilidad, así se haya dilapidado el dinero, se trata de saber lo que él hizo, que está muy lejos de lo que relata.

Pongámoslo claro: el manejo de la economía y finanzas públicas (el ministerio de Arce) antes y ahora, tiene que ver con lo que entra y con lo que sale de plata. ¿Y qué era lo que generaba el ingreso? Hidrocarburos, el área más platuda, más rica y que más generaba. Eso lo manejaba Arce para darle gusto a Evo Morales en todo lo que quería. Si comenzaba a no haber plata (desde 2014 es más evidente) se metió mano donde se pudo: a cualquier otro lado; YPFB ya no era ese turril sin fondo de donde se sacaba para satisfacer las angurrias del huido el 2029. Arce sabía lo que ocurría; la pregunta es: ¿no fue capaz de decirle al presidente que eso andaba mal y que no se podía seguir gastando al ritmo que él exigía? Entonces, Arce: ¿Ministro o cajero?.

Pero Arce no solo miente sobre esa situación, sino que lo hace también sobre su llegada al gobierno propio, cuando en la citada conversación decidió asegurar:

“Ha pasado pues muchas cosas, hermanas. Muchas cosas. Cuando entramos al gobierno, en noviembre del dos mil veinte. Ustedes saben cómo hemos encontrado nuestro país. Un país altamente endeudado, que enfrentaba la pandemia.

Un país que no tenía perspectiva, pero también nos encontramos con la gran sorpresa de que el deterioro de la producción de hidrocarburos estaba a punto de tocar a fondo. No se había hecho exploraciones y exploraciones exitosas en catorce años. En catorce años no se había hecho más que cuatro pozos exploratorios en el país, ninguno exitoso y nos habíamos estado comiendo el gas y ese es el principal elemento que explica el por qué sucede todo lo que sucede en nuestro país”.

Fabulador, negador de la realidad, corto de memoria o mentiroso el presidente Arce… (tache el lector lo que no corresponde), porque no se puede ser tan impune como para negar la realidad:

Existe una Resolución Suprema de 13 de diciembre del año 2010, numero 04933, firmada por Evo Morales y el propio Luis Alberto Arce Catacora, en la que se designa a Marcelo Montenegro García “Representante del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas”, como miembro del Directorio de YPFB.

Si se presta atención, Montenegro es el actual ministro de economía y Finanzas públicas, que es el cargo que ocupaba Arce Catacora ¿será que Montenegro jamás hizo un informe a Arce, sobre la situación de YPFB?

Además de ello, recordemos que ¿Luis Alberto Arce Catacora fue director de YPFB el año 2018, designado por la Junta de Accionistas.
(https://www.noticiasfides.com/economia/exministro-luis-arce-es-el-nuevo-director-de-ypfb-transporte-388771#google_vignette)

La noticia de referencia es de fecha 13-06-20138. La información fue difundía por la bolsa boliviana valores, donde cotiza la compañía estatal. El expresidente fue designado en la Junta de Accionistas el once de junio. Arce fue parte del directorio con Oscar Barriga, presidente de YPFB, Wilmer Saavedra, Wilson Celaya, Florencio Vladimir López, José William Morales Arteaga, y Víctor Eduardo Saldías.

Ese fue el espacio que le dio Evo Morales antes de retornarlo al cargo que había ocupado desde el 2006 a 2017, o sea, 11 años.

La memoria o la caradurez hace que Arce se olvide que debe haber recomendado a su actual ministro de economía y finanzas públicas como “Representante del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas” en la empresa (YPFB) y que él mismo fue director de la empresa más importante de Bolivia en ese tiempo. A propósito, ¿por qué cambiaron a Montenegro? Es verdad que: “al ser cuota de Arce” este se fue cuando el ministro debió renunciar por enfermedad? Dejémoslo claro: su ministerio estaba enterado de todo cuanto ocurría y él mismo, antes de ser ministro fue director de YPFB, la empresa que dice él que no sabía el estado en el que estaba, pero, seguramente cobró dieta por reunión.

Resumiendo: es claro que Arce Catacora no puede argumentar de que no estaba enterado de lo que sucedía en YPFB, ni de la crisis que, para entonces ya se conocía, cuando accedió al cargo de presidente de la república. No se le puede creer eso de: yo no sabía nada, yo no era el ministro. ¿No investigó nunca, por qué se estaba recibiendo menos plata de hidrocarburos? ¿En serio no investigó nunca? ¿Qué clase de ministro era? Ministro cajero recibía la plata de un lado y la pasaba para el otro. ¿Era el ministro que le daba gusto a Evo Morales y listo?

Del ridículo no se vuelve, Arce no tiene retorno.

Por Carlos Federico Valverde bravo