Maestros y Ponchos Rojos irrumpen en Plaza Murillo y dan ultimátum al Gobierno
Exigen soluciones a la crisis económica y la destitución de altas autoridades
El magisterio urbano y la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de la provincia Omasuyos, conocidos como Ponchos Rojos, ingresaron este martes a la plaza Murillo para protestar contra la crisis económica, el alza de precios y la escasez de combustibles.
La Policía intentó bloquear el paso de los maestros, lo que generó el respaldo inmediato de los campesinos. “No podemos permitir que nos expulsen. Los Ponchos Rojos somos radicales y si nos tocan, carajo, vamos a bloquear hasta expulsar a este Gobierno incapaz”, advirtió Enrique Mamani, líder de la federación campesina.
El dirigente dio al Gobierno un plazo de 24 horas para destituir al ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño; al presidente de YPFB, Armin Dorgathen; y a los directores de la Agencia Nacional de Hidrocarburos y la Administradora Boliviana de Carreteras, Germán Jiménez y Marcel Claure, a quienes calificó de “incapaces”.
Por su parte, los maestros exigen un incremento salarial acorde con la canasta familiar, una escala móvil de sueldos y una jubilación con el 100% de sus aportes. La protesta se enmarca en las movilizaciones nacionales de la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia.