Organizaciones de 3 países piden negar refugio a Ochoa
Los representantes de la Asociación Nacional de la Prensa de Bolivia (ANP) Fundamedios (Ecuador) e IPYS (Perú) solicitaron al Gobierno que niegue la concesión del estatus de refugiado a Carlos Ochoa, exsuperintendente de Comunicación de Ecuador. Esas organizaciones pidieron devolver al buscado a autoridades de su país para que responda por los delitos que cometió en el ejercicio de sus funciones.
“Este 14 de febrero reunidos en Sucre, Bolivia, los representantes de la ANP, Fundamedios (Ecuador) e IPYS (Perú), organizaciones que forman parte del proyecto regional Voces del Sur, resolvieron solicitar al Gobierno boliviano que resuelva en derecho la negativa para la concesión del estatus de refugiado al exsuperintendente de Comunicación del Ecuador, señor Carlos Ochoa”, se lee en el comunicado que emitieron.
Las organizaciones de prensa y de defensa de la libertad de expresión afirmaron que no hay “ninguna causa” para que Ochoa pueda ser considerado un perseguido político, “pues en el Ecuador debe responder a un juicio por falsificación de documento público, uso del mismo documento falsificado para sancionar fraudulentamente a 11 medios de comunicación y malversación de fondos públicos al ordenar la impresión de 300 mil ejemplares de la Ley de Comunicación que contenía alteraciones a la norma, presuntamente perpetradas por Ochoa”.
En el pronunciamiento, las organizaciones indican que “cabe recordar que en este caso registrado en 2016, Fundamedios y el Colegio de Abogados de Pichincha (Ecuador) presentaron una denuncia en contra del entonces funcionario”.
El 4 de febrero, el Gobierno confirmó que está en trámite en Bolivia el pedido de refugio que solicitaron los ecuatorianos Ochoa y Sofía Espín, ambos excolaboradores cercanos del expresidente Rafael Correa.
Un día después se conoció que el Gobierno de Ecuador envió a la Cancillería la documentación que certifica que Ochoa y Espín son requeridos por la justicia de ese país y que “deben responder por infracciones penales comunes”. Entre los documentos que se mandó a las autoridades bolivianas están: la certificación que detalla los casos judiciales pendientes de Ochoa.
El 8 de febrero, periodistas nacionales expresaron su preocupación por el eventual refugio a Ochoa. Hubo comunicadores que expresaron su inquietud, dado que consideraron que si se consolida la acogida del exfuncionario, hay la probabilidad de que se reproduzcan en territorio nacional las prácticas que implementó en su país.
En entrevista con Página Siete, Fabricio Villamar, asambleísta de Ecuador que impulsó el juicio político contra Ochoa en la Asamblea Nacional, afirmó que éste “era la cara visible de la persecución a quienes pensaban diferente en Ecuador”.
“Ochoa está siendo sindicado por un delito, no es un perseguido político. Las responsabilidades políticas que tuvo que enfrentar las enfrentó”, agregó el legislador.
El martes, el canciller Diego Pary informó que la Comisión Nacional del Refugiado (Conare) tiene 120 días para analizar y responder la solicitud de refugio que pidieron Ochoa y Espín.
Ochoa, “hombre fuerte” de Correa
Carlos Ochoa es periodista y exsuperintendente de Información y Comunicación de Ecuador.
En marzo de 2018, Ochoa, considerado uno de los “hombres fuertes” del expresidente Rafael Correa, fue censurado y destituido del cargo por la Asamblea Nacional de Ecuador.
Durante su gestión, Ochoa impulsó multas contra medios de comunicación; además de centenares de pedidos de rectificaciones y aclaraciones.
Fabricio Villamar, asambleísta de Ecuador que impulsó el juicio político contra Ochoa en la Asamblea Nacional, informó que éste, como superintendente de comunicaciones, “sancionaba a medios de comunicación o a ecuatorianos por lo que la gente decía”.
“Incluso llegó a sancionar por casos de opinión y llegó a sancionar a caricaturistas. Cuando esto sucedió, cuando nosotros asumimos nuestros puestos en esta posición, en 2017, yo le seguí el juicio político a Ochoa, que lo llevó a su censura y destitución”, sostuvo el legislador.
Pagina Siete.