Cerca de 2.000 casos de violencia contra menores
Los casos de violencia hacia infantes y adolescentes, registrados por las alcaldías de La Paz y El Alto, suman cerca de 2 mil en lo que va de este 2019, entre ambos municipios.
En el municipio de La Paz, la Secretaría de Desarrollo Social informó que entre enero y el 31 de marzo se registraron 1.308 casos de violencia. En 2018, la cifra total registrada fue de 6.744 casos.
En El Alto, la secretaria municipal de Desarrollo Social, Blanca Mendoza, informó que desde enero a los primeros días de abril se registró alrededor de 600 problemas. En esta urbe los casos de violencia a niños y adolescentes sumaron 4.588 el año pasado.
Es decir que sumados La Paz y El Alto registraron en 2019 más de 1.900 casos de violencia a los infantes y adolescentes, mientras que en todo el 2108 entre ambas ciudades hubo más de 11 mil casos.
Mendoza indicó que entre los casos que se atienden en El Alto se destacan los de asistencia familiar, conflictos de guarda, abandono, ausencia de filiación, falta de atención en salud, además de las diferentes formas de violencia psicológica y física, incluyendo cuatro hechos de infanticidio en 2018.
“Hay un número alto en el que las mamás piden la asistencia familiar, aún muchos papás lastimosamente no están brindando asistencia y este es una tipología también de maltrato, de abandono”, resaltó.
En el caso de La Paz, del total de casos atendidos en 2019, 59 tuvieron connotación en materia penal, entre estos 18 casos de violación, 13 de abuso sexual, 11 de violación a infante y nueve de estupro.
Mendoza explicó a los padres que usar términos insultantes contra los niños y hasta decirles que son estorbos, pueden marcar sus vidas generándoles aislamientos y sobre todo inseguridad y desconfianza en sus progenitores.
“También tenemos que los niños al ver que no reciben amor en sus familias en sus casas, ellos se dedican a buscar otros amiguitos, muchas veces nosotros decimos porque los jóvenes están ahora en pandillas y tenemos que pensar que nosotros tampoco les hemos dado el amor que debíamos darle cuando ella ellos serán niños”, acotó.
La funcionaria también recomendó a los padres que piensen un segundo antes de gritar a sus hijos o agredirlos, y marcarles la vida para siempre. Dijo que hay formas de castigar a los niños y adolescentes, pero sin violencia.
A su turno, la secretaria de Desarrollo Social de La Paz, Rosmery Acarapi, explicó que con acciones propositivas se puede tener impactos positivos en los niños. Indicó que los maestros pueden motivar a los infantes a que estudien; mientras que los padres pueden mejorar simplemente dando reflexiones y comunicándose asertivamente con sus hijos.
“Sabemos que hay que educar a los hijos, pero no es a golpes, la letra no entra con sangre, necesariamente tenemos la posibilidad de enseñar con amor, con firmeza sí, con cariño”, agregó. (Erbol)
El Diario.