Tariquía: esperan un potencial de $us 5.181 MM de renta petrolera
En el área San Telmo Norte, entre las provincias O’Connor y Arce de Gran Chaco, Tarija, que ocupa una parte de la Reserva Nacional de Flora y Fauna de Tariquía, se calcula un potencial de 1,08 Trillones de Pies Cúbicos (TCF) de gas natural y se prevé la generación de 5.181 millones de dólares de renta petrolera.
Según el Ministerio de Hidrocarburos, estos recursos serán obtenidos durante la vida del proyecto, en el que el operador Petrobras Bolivia ejecuta una inversión de 193 millones de dólares para la fase de exploración y explotación.
Comunarios de Chiquiacá Norte se declararon en emergencia por la presencia de la Policía que ingresó al territorio Tariquía, junto a Petrobras Bolivia, que inició trabajos previos a la perforación de los pozos exploratorios Domo Oso X1 y X2.
La secretaria general del cantón Pampa Grande, Distrito 8 de Tariquía, Amanda Colque, informó ayer que desde el miércoles un grupo de 70 personas bloquean el acceso que conecta a los pozos exploratorios, que se pretende realizar, zona denominada Chiquiaca Norte.
“Estamos un grupo de personas. Al lugar ya ingresaron tres camionetas cargadas de al menos 40 policías. Bloqueamos pacíficamente el acceso porque nadie nos ha consultado, se han entrado a nuestra casa por la fuerza. Hemos visto que la empresa ha contratado gente del lugar para que hagan trabajos de macheteo con el fin de abrir camino. Los que trabajan son dirigentes vendidos”, declaró Colque a Página Siete.
Precisó que en el lugar los pobladores que no permiten el paso pertenecen a ocho comunidades del cantón Tariquía, quienes en una asamblea, que se realizará hoy, emitirán su voto resolutivo sobre las otras medidas por asumir. “Cómo es posible que la Policía nacional pueda resguardar a una empresa petrolera extranjera. No nos han hecho las consultas para ingresar al lugar y vamos a defender nuestro territorio”, lamentó la representante.
José Antonio Campanini, investigador del Centro de Documentación e Información de Bolivia (CEDIB), anticipó que en el caso de que la exploración sea positiva, tomará muchos años para que el campo entre en producción comercial.
“La apertura de áreas protegidas a la exploración es una medida desesperada que sólo genera conflicto y riesgo ambiental. Debemos de seguir siendo un país exportador de materia prima. Cerca del 90% del gas que explotamos se va a exportación y eso genera una obsesión por descubrir reservorios”, añadió.
En criterio de Campanini, para no afectar áreas protegidas se debería dar paso de manera prioritaria a un proceso de planificación territorial estratégica, respetando las culturas, el medio ambiente y la conservación.
Eso permitirá identificar zonas para la explotación sin afectar el ecosistema.