- Vicepresidente destaca avances en la reclasificación de la hoja de coca y su potencial industrial
El vicepresidente de Bolivia, David Choquehuanca, afirmó que la industrialización y comercialización de la hoja de coca, una vez que sea desclasificada de la lista 1 de estupefacientes de las Naciones Unidas, podría generar mayores ingresos económicos que el gas, una de las principales fuentes de divisas del país.
“Porque ese es el objetivo, hay que liberarla del narcotráfico. Dicen que nos pueden dar millones… Hermanos, habrá buenas noticias. Yo estoy escuchando a los científicos del mundo: la hoja de coca en algún momento nos puede dar más que nuestro gas”, aseguró Choquehuanca durante una reunión con dirigentes de la Asociación Departamental de Productores de Coca (ADEPCOCA) del departamento de La Paz.
El vicepresidente también destacó que diversas empresas internacionales han mostrado interés en desvincular la hoja de coca del narcotráfico y explorar sus beneficios en diversas industrias. “La ciencia nos está dando la razón. En el mundo se está discutiendo, en Naciones Unidas, y el mundo ya sabe de las cualidades alimenticias y medicinales de la hoja de coca, pero está prohibido que viaje por el mundo, está enclaustrada”, lamentó, según un boletín institucional.
Durante su intervención, informó sobre los avances en el proceso de reclasificación de la hoja de coca, destacando que varios países están investigando sus aplicaciones en las industrias alimenticia, farmacéutica y médica, además de sus usos tradicionales.
Bolivia ya ha dado pasos significativos en este ámbito. En 2011, el país se retiró de la Convención de Viena y solicitó su readmisión en diciembre con la condición de que no se penalizara el acullico. “¿Por qué Bolivia logra la despenalización del acullico? Porque lo hemos fundamentado históricamente y jurídicamente bien”, destacó Choquehuanca, recordando que ningún gobierno anterior desde 1961 había trabajado en reivindicar los usos y beneficios de la hoja de coca.
En la reunión también participaron el viceministro de Coca y Desarrollo Integral, Mateo Mamani, y el director General de Comercialización e Industrialización de la Hoja de Coca (DIGCOIN), Edwin Cornejo, quienes escucharon las necesidades y propuestas de los dirigentes cocaleros.
Con el respaldo de la ciencia y el interés internacional, la hoja de coca podría convertirse en un nuevo motor económico para Bolivia, siempre que el país logre su desclasificación como estupefaciente y su integración al mercado global de manera sostenible y libre del narcotráfico. “Habrá buenas noticias”, anticipó el vicepresidente, dejando en claro que el futuro de la hoja de coca podría marcar un nuevo capítulo en la historia económica del país.