- Ambas alcaldías acordaron cinco acciones inmediatas para mitigar riesgos en la zona y prevenir futuros desastres.
Tras una reunión técnica realizada este martes, las alcaldías de La Paz y Achocalla determinaron que la empresa inmobiliaria Kantutani deberá implementar un plan de contingencia para reducir los riesgos en Bajo Llojeta. Este acuerdo surge luego de una mazamorra registrada el fin de semana, atribuida a movimientos irregulares de tierra realizados por la empresa.
El secretario Municipal de Resiliencia y Gestión de Vulnerabilidades de La Paz, Juan Pablo Palma, detalló las cinco acciones que Kantutani deberá asumir de manera inmediata:
- Reconducir las aguas superficiales de forma segura y adecuada.
- Retirar el material acumulado en el lecho del río.
- Evaluar las condiciones de funcionamiento de la bóveda construida por la empresa, que provocó el desvío del curso natural del río.
- Realizar trabajos seguros en el talud deslizado, procurando retirar carga de manera controlada.
- Ejecutar obras de control hidráulico en todo el sector afectado y aguas arriba.
“Nosotros tenemos información, advertencias y llamadas de atención a esta empresa, alertando sobre el peligro de los trabajos que realizaban. Lo mismo ocurrió desde el municipio de Achocalla, cuyos técnicos también advirtieron los riesgos,” afirmó el alcalde de La Paz, Iván Arias, quien descartó que ambas alcaldías hayan autorizado movimientos de tierra en la zona.
Por su parte, el alcalde de Achocalla, Manuel Condori, respaldó las observaciones técnicas y enfatizó que la documentación recopilada corrobora las advertencias previas realizadas a Kantutani.
En caso de que la inmobiliaria no cumpla con la presentación y ejecución del plan de contingencia requerido, ambas comunas adelantaron que no descartan emprender acciones legales adicionales para garantizar la seguridad en el sector y prevenir nuevos desastres.