
Descubren y desmantelan megalaboratorio de cocaína en provincia Ichilo, Santa Cruz
- Instalación de gran envergadura operaba al estilo «colombiano» y lograba producción mensual millonaria.
En un golpe significativo contra el narcotráfico, las autoridades de la provincia Ichilo, en el departamento de Santa Cruz, han desmantelado un megalaboratorio de clorhidrato de cocaína que operaba en las sombras.
La instalación, de características asombrosas y capacidad productiva impresionante, se encontraba camuflada en una vasta extensión de terreno y ha sido erradicada en un operativo que revela el compromiso continuo en la lucha contra este flagelo.
Las fuerzas de seguridad han informado que el megalaboratorio ocupaba un área de alrededor de 500 metros cuadrados, conformando una estructura compleja con una gama de instalaciones.
Esta ‘megafactoría’, como la han denominado las autoridades, no solo albergaba equipos y maquinaria especializada para la elaboración de cocaína, sino que sorprendentemente contaba con dormitorios equipados con 10 camas, duchas, baños y hasta un espacio de cocina y comedor.
Un descubrimiento que ha dejado boquiabiertos a los encargados de la operación.
En el operativo también se encontraron indicios adicionales de la envergadura de la operación ilícita. Uniformes militares y policiales, junto con municiones de distintos calibres, fueron hallados en el sitio, evidenciando un alto grado de organización y un intento por ocultar sus actividades bajo una fachada que involucraba elementos de seguridad.
El viceministro Jaime Mamani, encargado de la cartera de lucha contra el narcotráfico, ha detallado que este megalaboratorio seguía un patrón operativo «colombiano», y que aparentemente llevaba a cabo sus actividades ilícitas desde hace seis meses.
Su ubicación estratégica en la zona Los Limos, a orillas del río Piraí, proporcionaba una ventaja logística aprovechada por los traficantes: en épocas de lluvia, la zona se inundaba, lo que facilitaba el transporte de precursores químicos a través de las aguas.
Mamani ha subrayado que este megalaboratorio estaba equipado con una variedad de áreas funcionales, cada una contribuyendo a diferentes etapas del proceso de producción. Desde cocina y comedor hasta sistemas de filtrado y destilación, pasando por áreas de secado y pesaje, el laboratorio tenía una organización meticulosa que reflejaba una sofisticación sorprendente. Además, contaba con comunicación por radio y otras herramientas esenciales para su operación.
El viceministro, a través de su cuenta de Facebook, compartió los detalles cruciales del operativo y la magnitud del impacto logrado. «Este megalaboratorio tenía una capacidad de producción de 400 a 500 kilos mensuales de clorhidrato de cocaína, y con su destrucción total logramos afectar al patrimonio del narcotráfico en más de $us 800.000», resaltó Mamani.
La lucha contra el narcotráfico continúa siendo una prioridad en la región, y este reciente desmantelamiento de un megalaboratorio de tal magnitud es un recordatorio contundente de que las autoridades están comprometidas en desbaratar las operaciones ilícitas que amenazan la seguridad y el bienestar de la sociedad.