
“Solo salimos con el 30% de micros”: crisis del diésel paraliza y golpea al transporte público en Santa Cruz
Choferes denuncian que pasan horas e incluso días esperando cargar combustible, mientras la escasez de diésel reduce drásticamente el servicio y afecta a miles de usuarios en Santa Cruz.
La escasez de diésel sigue dejando secuelas en el transporte público. La línea 108, una de las más transitadas de Santa Cruz, apenas logró poner en circulación 30 micros este miércoles, lo que representa apenas el 30% de su flota habitual de 100 unidades.

“Aquí estamos trabajando con lo que se puede. Con el tema del diésel, es difícil trabajar todos los días”, relató uno de los conductores durante una transmisión en vivo para El Mañanero, reflejando el drama que viven los choferes ante la falta de combustible.
Muchos transportistas reportan que pasan horas o incluso días en fila para poder abastecerse. “A veces pasamos un día entero. Otras veces, con suerte, algo logramos cargar”, añadió otro conductor afectado.
La situación no solo implica un perjuicio para la población usuaria, sino también una pérdida directa para los trabajadores del volante, cuyo ingreso depende del servicio diario. Cada jornada que no salen a trabajar representa dinero que no entra a sus hogares.
La ruta de la línea 108 abarca puntos estratégicos de la ciudad, como el mercado Belén, el Zoológico Municipal, la avenida Cristo Redentor, el segundo anillo, las siete calles, el mercado La Ramada, hasta llegar al sur por la avenida Santos Dumont.
Pese a que el receso escolar ha reducido el número de pasajeros, el impacto es visible en las calles: paradas vacías de micros, esperas prolongadas y una población que siente el golpe de una crisis que se agudiza cada semana.
Ante este escenario, los transportistas exigen una solución urgente al problema de abastecimiento. “Nuestro trabajo depende del diésel. Y si no hay, no podemos trabajar ni prestar servicio a la gente”, reclamó un chofer que aún continúa en circulación.