
Defensa de Jeanine Añez presenta recurso de casación en el caso «Golpe de Estado II»
- La exmandataria busca anular la condena de 10 años de cárcel emitida en su contra
En un intento por anular la sentencia del caso conocido como «Golpe de Estado II», la defensa legal de Jeanine Añez presentó este lunes un recurso de casación, considerado como la última instancia dentro del ordenamiento jurídico penal.
La exmandataria boliviana fue condenada a 10 años de prisión por un tribunal de sentencia, sentencia que posteriormente fue confirmada por una Sala Penal de La Paz. Ahora, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) será el encargado de determinar si la sentencia se modifica o se mantiene.
El abogado Luis Guillén, representante legal de Añez, destacó la importancia de este recurso extraordinario, señalando que existen múltiples agravios y vulneraciones que deben ser considerados en el caso de la exmandataria.
«Este es el último recurso disponible dentro de nuestro ordenamiento interno. Dadas las circunstancias y las irregularidades presentes en el proceso, amerita interponerlo», afirmó Guillén.
El objetivo de la defensa es claro: lograr la anulación de la sentencia que pesa sobre la exmandataria. En caso de que el resultado del recurso sea negativo, los abogados anunciaron que agotarán las instancias nacionales para, finalmente, recurrir al sistema interamericano de derechos humanos y presentar una demanda.
La sentencia inicial, emitida en 2022, condenaba a Añez a 10 años de cárcel por los delitos de resoluciones contrarias a la Constitución e incumplimiento de deberes, argumentando que habría asumido irregularmente la presidencia en 2019.
Durante el presente año, la Sala Penal Cuarta de La Paz ratificó la condena de 10 años de prisión para la expresidenta, pero realizó cambios en los criterios de la condena, excluyendo el delito de incumplimiento de deberes.
La defensa de Añez sostiene que su clienta debió ser sometida a un juicio de responsabilidades y niega la ilegalidad de la asunción de la presidencia en 2019, argumentando que existía un vacío de poder debido a las renuncias de autoridades anteriores, lo que habría permitido su asunción constitucionalmente.