La medida será excepcional y se aplicará en todo el país, suspendiendo actividades laborales, educativas y administrativas

El Gobierno nacional oficializó este miércoles la declaración de feriado nacional para los días 6 y 7 de agosto en conmemoración del Bicentenario de la independencia de Bolivia, según anunció el ministro de Trabajo, Víctor Quispe.

La medida, calificada como excepcional, abarcará tanto al sector público como privado, permitiendo una pausa generalizada en todo el país durante las dos jornadas festivas.

“Se trata de un reconocimiento a los 200 años de vida independiente de Bolivia”, explicó Quispe, quien precisó que la disposición fue tomada con carácter nacional.

Con esta decisión, quedarán suspendidas todas las actividades laborales, educativas y administrativas, tanto en instituciones estatales como en empresas privadas, centros de estudio y oficinas públicas.