
Escándalo en ENTEL: Renuncian dos gerentes tras denuncia de fiesta con desnudista en oficinas
- Ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, anuncia medidas drásticas y afirma que no habrá perdón para los responsables.
La empresa de telecomunicaciones ENTEL se ve sacudida por un escándalo tras la denuncia de una fiesta en sus oficinas, en la que habría participado un desnudista. La situación ha llevado a la renuncia de dos altos gerentes, mientras el ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, advierte que se aplicará «mano dura» contra los involucrados.
ENTEL, la compañía estatal de telecomunicaciones, se encuentra en el ojo del huracán luego de que un diputado de la oposición, José Ormachea, destapara un escandaloso evento que habría tenido lugar en las instalaciones de la empresa.
Según la denuncia, la fiesta habría incluido la participación de un desnudista, lo que ha desencadenado una serie de reacciones y medidas por parte de las autoridades.
El ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, se ha manifestado enérgicamente al respecto, asegurando que no se tolerarán actos de este tipo por parte de funcionarios de entidades públicas. En una conferencia de prensa realizada este lunes, Montaño afirmó con firmeza: «No va a haber perdón alguno para aquellos funcionarios que piensan que las entidades públicas están para jolgorios».
En respuesta a la situación, Montaño reveló que dos gerentes han decidido presentar su renuncia como consecuencia del escándalo. Aunque no proporcionó los nombres de los involucrados, indicó que uno de ellos es el gerente jurídico, y el otro es el gerente administrativo. Con estas renuncias, los dos altos ejecutivos dejarán de formar parte de ENTEL, marcando un primer paso en la gestión de la crisis por parte de la empresa.
El diputado Ormachea, perteneciente a Comunidad Ciudadana, fue quien puso al descubierto la polémica al presentar evidencias gráficas de la fiesta en las oficinas de ENTEL y señalar directamente a altos funcionarios de estar involucrados en el evento. La denuncia adquiere una dimensión particular debido a que ENTEL es una empresa con mayoría accionaria del Estado, lo que agrega un componente de responsabilidad pública al escándalo.
El ministro Montaño aseguró que, tan pronto como tuvo conocimiento de los acontecimientos, instruyó la aplicación de medidas drásticas para abordar la situación. «Yo he instruido mano dura a todos aquellos funcionarios que estén involucrados en este tema, por lo tanto se está siguiendo mis instrucciones y ya se ha avanzado en esta temática», declaró el ministro.
En este contexto, Montaño también destacó que el presidente del país, Luis Arce, ha dado directrices claras en cuanto al uso adecuado de los bienes del Estado y la conducta de los funcionarios públicos. La instrucción de «mano dura» no solo proviene del ministro, sino que también se alinea con la postura presidencial de mantener una gestión ética y responsable en el ámbito gubernamental.
La revelación de esta fiesta escandalosa en las oficinas de ENTEL ha desatado una serie de acontecimientos que han capturado la atención de la opinión pública. La renuncia de los dos gerentes marca un inicio en la rendición de cuentas, mientras las investigaciones y acciones adicionales se perfilan en el horizonte. La sociedad espera que este incidente sea un recordatorio contundente de que la integridad y la responsabilidad deben prevalecer en las instituciones públicas, sin importar su naturaleza.