Trece candidatos competirán en las elecciones de agosto: cinco partidos están obligados a participar para no perder su personería

  • La papeleta electoral de agosto contará con 13 franjas, lo que garantiza una contienda plural. Mientras, cinco partidos políticos enfrentan el desafío de participar o arriesgar la cancelación de su registro.

La próxima papeleta electoral de Bolivia será una de las más diversas en los últimos años, con 13 franjas correspondientes a igual número de candidatos presidenciales, según confirmó el vocal del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Tahuichi Tauhichi Quispe. Este diseño elimina por completo la posibilidad de una candidatura única, asegurando una competencia plural en los comicios de agosto.

Prensa Libre

Cinco partidos políticos están obligados a participar en estas elecciones para evitar la pérdida de su personería jurídica: Demócratas, Unidad Nacional, MTS, MNR y ADN. «Estos cinco partidos no participaron en las elecciones presidenciales de 2020, por lo que ahora deben hacerlo o enfrentar la cancelación de su registro», explicó Quispe, según un reporte de El Deber.

Hasta el 18 de abril, cinco alianzas y ocho partidos presentaron su documentación para participar en el proceso electoral. En total, los 14 partidos con registro en el TSE manifestaron su intención de competir, ya sea en solitario o mediante alianzas. Un caso destacado es la coalición «Libre», conformada por Demócratas y el FRI, lo que reduce a 13 el número de franjas en la papeleta.

Quispe recordó que, en 2020, ADN participó en alianza con Juntos, postulando a la entonces presidenta Jeanine Áñez. Sin embargo, los partidos pueden optar por no competir, aunque en esta ocasión la papeleta ya está configurada con 13 opciones.

El desafío del 3%
Los partidos también deben considerar otro requisito clave: aquellos que no alcancen al menos el 3% de los votos perderán automáticamente su personería jurídica, tal como ocurrió con el Movimiento Sin Miedo (MSM) y el Partido Verde de Bolivia (PVB) en 2014. No obstante, existe una salvedad: «Si un partido considera que no tiene fuerza suficiente, puede abstenerse y conservar su registro para futuras elecciones», aclaró el vocal del TSE.

Esta «licencia» fue utilizada por los cinco partidos ahora obligados a competir. Si no lo hacen en agosto, su existencia legal quedará en riesgo, marcando un momento decisivo para el panorama político boliviano.

Con una papeleta multicolor y multisigno, las elecciones de agosto prometen ser una de las más competidas en la historia reciente del país.