
El café de los Yungas conquista la Expocruz: un aroma de desarrollo sostenible
- El producto, que se exhibe en la feria cruceña, es el resultado de un proyecto de sustitución de cultivos respaldado por Naciones Unidas y Corea del Sur, que beneficia a 1.000 familias y promueve una alternativa económica viable en la región.
El emblemático café de altura de Los Yungas de La Paz se roba las miradas y los paladares en la Expocruz. En un stand que despierta los sentidos, los visitantes tienen la oportunidad única de degustar variedades de alta calidad como Geisha, Castillo y Catuai, pero, más allá del exquisito sabor, esta infusión representa la semilla de un profundo cambio socioeconómico para la región. Este producto es el resultado tangible de un proyecto estratégico que busca sustituir el cultivo de coca excedentaria por café de alto rendimiento y valor comercial.

La iniciativa, denominada “Fortalecimiento de las economías locales y control de la expansión de cultivos excedentarios de coca a través del mejoramiento de la productividad y comercialización de café”, es impulsada por una alianza entre la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) y la Agencia de Cooperación Internacional de Corea (KOICA). El embajador de Corea del Sur, Lee Jang, junto a la representante de la UNODC, Mónica Mendoza, fueron los encargados de inaugurar el espacio que sirve como vitrina para los caficultores de los municipios de La Asunta, Caranavi y Chulumani.
«Gracias por aceptar este proyecto que llevamos construyendo dos años, arrancó el año pasado y tenemos un trabajo conjunto para los próximos cinco años», explicó el diplomático coreano durante la inauguración, proyectando una visión de largo aliento para esta cooperación.
El impacto del proyecto es significativo: se espera beneficiar directamente a 1.000 familias con la implementación de 888 hectáreas de café bajo sistemas agroforestales y la comercialización de 345 toneladas del grano. Durante toda la feria, los productores y productoras compartirán sus experiencias, detallando el meticuloso proceso que va desde la cosecha hasta la taza, y presentando las distintas variedades que han logrado cultivar.
La voz de los protagonistas no se hizo esperar. Emilio Tintaya, presidente de la Asociación Integral de Productores Agroecológicos «El Mirador» (ASIPAEM) de La Asunta, presentó con orgullo la variedad Castillo en una degustación, resaltando sus cualidades únicas. Por su parte, Gaby Choque, proveniente de Chulumani, compartió el Catuai y expresó su agradecimiento: «Agradecemos el apoyo de Corea del Sur y KOICA, y nosotros como productores responderemos con el compromiso de ofrecer un café de alta calidad».
Quizás una de las perspectivas más alentadoras la brindó Sofía Mamani, del municipio de Caranavi, quien señaló que este proyecto está motivando a los jóvenes de su comunidad a ver en el café una alternativa sostenible y con futuro, reduciendo la dependencia de otros cultivos. Su testimonio refleja el objetivo central de la iniciativa: generar un desarrollo económico legítimo y duradero que arraigue a las nuevas generaciones a su tierra con esperanza.
El aroma del café de Los Yungas en la Expocruz no solo invita a una pausa, sino que narra una historia de transformación que está germinando en las laderas paceñas.