
Amparo Carvajal recupera histórica sede de APDHB en La Paz tras 51 días de vigilia
La activista de derechos humanos deja la vigilia ante apoyo nacional e internacional
Tras 51 días de incansable lucha, la icónica activista por los derechos humanos, Amparo Carvajal, ha dejado esta noche la vigilia instalada en la sede principal de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB) en La Paz.
La histórica sede había sido tomada por seguidores del partido de gobierno, generando una intensa lucha por su recuperación que atrajo el respaldo tanto a nivel nacional como internacional.
Carvajal, una religiosa y ciudadana española que llegó a Bolivia durante la época de las dictaduras militares en la década de los 70, decidió mantener una vigilia inicialmente en la calle y luego desde la terraza de la sede, tras subir por una escalera metálica sorprendiendo a las fuerzas policiales que se mantenían en el lugar.
La presencia de Carvajal en la terraza dio mayor notoriedad a su lucha, obteniendo un creciente apoyo a nivel nacional y ejerciendo presión sobre el gobierno para hacer cumplir una acción de amparo constitucional que garantizara su libre circulación dentro de la Asamblea y acceso a los servicios básicos.
La activista contó con el respaldo del Consulado de España en Bolivia, que realizó gestiones tanto con Carvajal como con el gobierno, liderado por afines al partido de gobierno bajo la dirección de Edgar Salazar, quienes también abandonaron las instalaciones después de haber mantenido un piquete de huelga de hambre en señal de resistencia a las resoluciones judiciales.
Tanto Amparo Carvajal como los seguidores de Salazar salieron de la sede sin que se conozcan detalles sobre si hubo un acuerdo para el desalojo simultáneo.
Mientras la octogenaria activista bajaba las gradas principales, los seguidores de Salazar también abandonaron el lugar portando sus pertenencias utilizadas durante la huelga de hambre.
La partida de Carvajal fue recibida con júbilo por sus seguidores, quienes reconocieron su determinación y valentía durante los 51 días de aguante, enfrentando el frío y la incomodidad de dormir en el suelo por las noches y permanecer sentada en la terraza durante el día.
La sede de APDHB, fundada por Carvajal en la década de los 70, ha sido un símbolo importante para la lucha en defensa de los derechos humanos.
Mientras continúan las movilizaciones de diversas instituciones públicas exigiendo la preservación de la salud de Amparo Carvajal, aún no se ha informado si habrá una reunión para resolver la presidencia de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos.
Por un lado, Carvajal asegura haber sido elegida en marzo de este año en un Congreso Ordinario con presencia de todas las direcciones departamentales, mientras que Edgar Salazar sostiene lo mismo, aunque su postura ha sido descalificada y tachada por su supuesta intención de tomar la institución en favor del gobierno del MAS.
La lucha por la presidencia y el futuro de APDHB aún se mantiene en un punto de incertidumbre.