
Fundación Jubileo revela subestimación de pobreza en Bolivia: cifras oficiales no reflejan la realidad inflacionaria
- Un estudio expone que el INE minimizó los índices de pobreza y sobreestimó el tamaño de la clase media, creando una «ilusión» estadística.
La Fundación Jubileo presentó este viernes una investigación que cuestiona las cifras oficiales de pobreza y clase media publicadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Según la economista Carla Cordero, la metodología del INE no ajusta adecuadamente los datos a la inflación, lo que distorsiona la realidad socioeconómica del país.

Pobreza subestimada: la brecha entre las cifras
Mientras el INE reportó que en 2023 el 36,5% de la población vivía en pobreza, el estudio de Jubileo —ajustando los valores por inflación— revela que la cifra real ascendería al 44%. En el caso de la pobreza extrema, la diferencia es aún más marcada: el INE registró un 11,9%, pero la fundación estima que alcanza al 17,5%. «En el área rural, casi seis de cada 10 personas están en pobreza extrema», destacó Cordero.
El problema radica en las líneas de medición. El INE considera pobre a quien gana menos de Bs 939 al mes (Bs 15 diarios), y en pobreza extrema a quienes perciben menos de Bs 468. Sin embargo, Jubileo demostró que, tras la inflación, estos umbrales deberían elevarse a Bs 1.080 y Bs 580, respectivamente. «Las líneas actuales están desfasadas y ocultan la verdadera magnitud del problema», afirmó la investigadora.
La «ilusión» de la clase media boliviana
Respecto a la clase media, el INE calcula que abarca al 59% de la población, con un ingreso mínimo de Bs 940 por persona. No obstante, al corregir los datos por inflación, Jubileo reduce esta cifra al 54%. «La clase media en Bolivia es más reducida y vulnerable de lo que se cree», advirtió Cordero.
La experta explicó que ascender a este estrato requiere años de esfuerzo, pero «un despido o una enfermedad pueden hacer caer a las familias nuevamente en la pobreza en semanas». La fragilidad se agrava por la falta de ahorros o redes de protección. «Sin canastas de resiliencia, los logros son temporales», remarcó.
Conclusión: estadísticas que invisibilizan la pobreza
El estudio concluye que las cifras oficiales generan una percepción errónea de estabilidad social, minimizando la pobreza y exagerando el crecimiento de la clase media. «Esto no solo afecta las políticas públicas, sino que niega la urgencia de medidas efectivas», señaló Cordero.
Ante estos hallazgos, Jubileo urge al Estado a actualizar las metodologías de medición y priorizar estrategias que fortalezcan la seguridad económica de los bolivianos, especialmente en contextos inflacionarios. Mientras tanto, la discrepancia entre los datos oficiales y la realidad sigue siendo un tema pendiente en la agenda nacional.