- El precandidato defendió su postura de no unirse a partidos tradicionales, asegurando que Bolivia necesita «estructuras nuevas» y liderazgos frescos para superar la crisis.
En un comunicado dirigido a la opinión pública, el precandidato Jaime Dunn respondió a las críticas por no haber concretado alianzas con Acción Democrática Nacionalista (ADN) y el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR). «No buscamos negociar espacios, sino construir una visión compartida para salvar Bolivia», declaró, enfatizando que su propuesta se centra en principios de libertad, renovación y nuevos liderazgos.
Dunn explicó que, si bien hubo diálogo con estas fuerzas políticas, no se lograron consolidar las coincidencias necesarias. «Con ADN y MNR no hubo tiempo para un acuerdo estructurado que permita un nuevo modelo político», precisó, añadiendo que su objetivo es sacar al MAS del gobierno y construir una «República auténtica».
El precandidato criticó duramente los llamados «bloques de unidad», que, según él, priorizan la suma de votos sin un proyecto claro. «Esa vieja política es la que debemos superar. La patria no se divide; se sirve», aseveró. Dunn insistió en que Bolivia necesita romper con el ciclo de «poder por el poder» y abrir paso a una etapa de transformación.
Finalmente, Dunn anunció que dará por cerradas las negociaciones con estos partidos y concentrará sus esfuerzos en «un nuevo pacto ciudadano, no con el pasado, sino con el futuro que anhelamos conquistar». Su mensaje refleja una apuesta por reinventar la política boliviana, alejándose de las estructuras tradicionales.