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- El expresidente, refugiado en el trópico de Cochabamba, asegura que su participación en los comicios del 17 de agosto es legítima, mientras la oposición insiste en que su candidatura viola la Constitución
El expresidente Evo Morales respondió este martes al precandidato Jorge «Tuto» Quiroga, quien días atrás lo desafió a un debate cara a cara, recordando que en anteriores elecciones el líder del MAS no participó en este tipo de confrontaciones públicas. «Al desafiarme a un debate, Tuto reconoce públicamente que estoy habilitado para las elecciones presidenciales del 17 de agosto próximo», escribió Morales en sus redes sociales, en un mensaje que rápidamente se viralizó.
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El exmandatario, quien se encuentra refugiado en la región del trópico de Cochabamba, aprovechó la ocasión para lanzar una crítica hacia la oposición y el llamado «imperio». «El pueblo debe debatir con el imperio. La izquierda con la derecha», afirmó, en un claro intento de polarizar el escenario político previo a los comicios.
Las elecciones generales, previstas para el próximo 17 de agosto, ya han comenzado a calentar el ambiente político en Bolivia. El cambio de mando está programado para el 8 de noviembre, pero la sombra de la controversia sobre la candidatura de Morales sigue siendo un tema central. Los sectores de oposición han reiterado que la pretensión del exmandatario de volver a postularse vulnera la Constitución Política del Estado (CPE).
Este 21 de febrero, los críticos de Morales recordaron el referendo de 2016, en el que el ‘NO’ a la modificación del artículo 168 de la CPE, que permitiría una nueva repostulación del expresidente, se impuso con el 51,3% de los votos. «Evo Morales no puede ignorar la voluntad del pueblo expresada en las urnas», señalaron desde las filas opositoras, insistiendo en que su candidatura carece de legitimidad.
Mientras tanto, Morales insiste en su derecho a participar en las elecciones, argumentando que su inhabilitación fue producto de un «golpe de Estado» y que, por tanto, no tiene validez legal. Su postura ha dividido aún más a un país que sigue buscando estabilidad política tras la crisis de 2019.
Con el reloj en marcha hacia el 17 de agosto, el debate sobre la habilitación de Morales promete ser uno de los temas más candentes de la campaña electoral, en un escenario donde las tensiones entre oficialismo y oposición no dan tregua.