
Fallece el Papa Francisco: Bolivia recuerda su histórica visita y mensaje de reconciliación
- El líder de la Iglesia Católica, de 88 años, murió tras una prolongada enfermedad, dejando un legado de diálogo y justicia social. Su paso por Bolivia en 2015 marcó un hito en la relación con los pueblos originarios y los reclamos marítimos.
El mundo católico está de luto tras la muerte del Papa Francisco, quien falleció a los 88 años luego de enfrentar una complicada enfermedad que deterioró su salud en los últimos meses. Su partida ha conmovido especialmente a Bolivia, país que visitó en julio de 2015 y donde dejó un mensaje de unidad, perdón y esperanza.

Una visita histórica
Del 8 al 10 de julio de 2015, el Sumo Pontífice se convirtió en el segundo papa en pisar suelo boliviano, después de Juan Pablo II en 1988. Fue recibido por el entonces presidente Evo Morales en el Aeropuerto Internacional El Alto, donde inició una agenda cargada de simbolismo. En el Palacio de Gobierno, recibió la Gran Cruz de la Orden del Cóndor de los Andes y la condecoración Luis Espinal Camps, en honor al sacerdote jesuita asesinado en 1980.
El mar, el perdón y Palmasola
Uno de los momentos más destacados fue su postura sobre la demanda marítima boliviana. Ante las autoridades, Francisco señaló: “Siempre hay una base de justicia cuando hay cambio de límites territoriales, sobre todo después de una guerra. No es injusto plantear ese anhelo”, en referencia al litigio de Bolivia contra Chile en la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Al día siguiente, durante una misa en Santa Cruz de la Sierra, el pontífice hizo un histórico mea culpa por los crímenes cometidos contra los pueblos indígenas en la era colonial: “Se han cometido muchos y graves pecados contra los pueblos originarios de América en nombre de Dios”, reconoció, pidiendo perdón en nombre de la Iglesia.
Su última parada fue la cárcel de Palmasola, donde instó a las autoridades a abandonar “la lógica de buenos y malos” y animó a los reclusos a “no perder la esperanza”.
Un legado que perdura
La visita del Papa Francisco reforzó su imagen como un líder cercano a los marginados. Bolivia lo recuerda no solo como un guía espiritual, sino como un defensor de la justicia y la reconciliación. Su mensaje sigue vigente en un país que aún lucha por superar heridas históricas.
Con su muerte, la Iglesia pierde a una figura transformadora, pero su legado en América Latina y el mundo perdurará como un llamado a la paz, la humildad y el diálogo.
Con datos de UNITEL