Gobierno convoca a Evo Morales a diálogo para evitar convulsión social por marcha de sectores aliados

  • Ministra Prada llama a Morales a dejar de promover confrontación mientras su movilización avanza hacia La Paz

En un contexto de creciente tensión política, el Gobierno de Bolivia, a través de la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, convocó al expresidente Evo Morales a un diálogo el viernes 20 de septiembre a las 18:00 en el Ministerio de Educación, en la ciudad de La Paz. El objetivo es analizar el pliego de demandas de Morales y sus sectores sociales aliados, con el fin de evitar un posible escenario de convulsión social ante la llegada de la denominada «Marcha para salvar Bolivia».

Prensa Libre

La marcha, liderada por Morales, ha avanzado hasta la localidad de Patacamaya en su tercer día, generando preocupación en el Gobierno por los reportes de agresiones que, según Prada, han tenido lugar en su recorrido. “Invitamos a Evo Morales mañana, 20 de septiembre, a las 18:00 en el Ministerio de Educación a entablar un diálogo para que deje de seguir llevando, no solo a parte de la militancia del MAS IPSP, sino a todo el pueblo boliviano a un enfrentamiento entre hermanos”, declaró la ministra.

Prada enfatizó que la movilización no ha sido pacífica, mencionando incidentes en Vila Vila, donde se registraron agresiones a personas «autoconvocadas», así como a periodistas de distintos medios que realizaban la cobertura del evento. “La vida del pueblo es y debe ser el bien mayor a cuidar y, como Gobierno del pueblo, a la cabeza de nuestro presidente Lucho Arce, vamos a defender nuestra democracia y actuaremos de acuerdo a lo que manda nuestra Constitución Política del Estado”, afirmó la autoridad.

El Gobierno considera que la marcha liderada por Morales busca crear un nuevo atentado contra la democracia, con el potencial de desencadenar un golpe de Estado en contra del presidente Luis Arce. Ante esta situación, la ministra reafirmó la voluntad del Gobierno de encontrar soluciones mediante el diálogo, en aras de preservar la estabilidad del país y evitar una escalada de conflictos.

El futuro de esta movilización y la respuesta del expresidente Morales al llamado al diálogo serán determinantes para el desarrollo de los próximos días en Bolivia, en un momento crítico para la estabilidad política y social del país.