
Productores de Coca de Yungas solicitan modificación de ley 906, mientras el Trópico se declara en alerta
- El Encuentro de Productores de Coca de Yungas exige reducir cultivos en el Chapare, desencadenando tensiones con el Trópico de Cochabamba.
En un encuentro realizado este lunes en la Vicepresidencia, los productores de coca de Yungas han solicitado la modificación de la Ley 906, con la firme intención de reducir la cantidad de cultivos permitidos en la región del Chapare.
Sin embargo, esta demanda ha desencadenado un estado de alerta en las federaciones del Trópico de Cochabamba, quienes no descartan movilizaciones en respuesta a esta iniciativa.
La convocatoria para este encuentro fue liderada por el diputado «arcista» Freddy Velásquez, quien argumentó que el Chapare no justifica las 7.700 hectáreas de cultivos que le otorga la actual Ley General de la Coca (906). Velásquez además hizo hincapié en los casos de factorías de droga descubiertas en esa región, argumentando que estos hallazgos respaldan su propuesta.
En el comunicado emitido durante el Encuentro, los cocaleros de Yungas expresaron su indignación por el hecho de que la Ley 906 permita la producción de coca en el Chapare, alegando que su destino final es el narcotráfico. El comunicado señala: «Demandamos la modificación de la Ley 906, ley general de la hoja de coca, y que la región del Chapare debe disminuir su producción, ya que la cantidad de hectáreas que produce no tiene un destino lícito».
En el marco de esta solicitud, se instó a los asambleístas a trabajar en una propuesta para modificar la Ley General de la Coca, y se acordó la creación de mesas de trabajo para abordar este asunto de manera más detallada.
El diputado Velásquez subrayó que «nada está escrito en piedra» con respecto a la ley, invitando a los cocaleros de Yungas a unirse a esta iniciativa. Culpa a la Ley 906, aprobada durante el gobierno de Evo Morales, de haber dividido a los cocaleros, argumentando que la norma se diseñó en beneficio del Trópico de Cochabamba.
Por otro lado, el líder de Adepcoca, Erlin Pari, también vinculó al Trópico de Cochabamba con el narcotráfico y sugirió que, si Evo Morales no quiere que el país se convierta en un «narcoestado», se debe erradicar toda la coca del Chapare.
En respuesta a estas demandas, el dirigente Dieter Mendoza, en representación de las federaciones del Trópico, acusó al diputado Velásquez de ser portavoz de Luis Arce y declaró que su región está en alerta ante la posible modificación de la Ley de Coca, incluso insinuando la posibilidad de movilizaciones.
Mendoza afirmó que en el Trópico, a través del control social, se cumple rigurosamente con la cuota de coca permitida por familia. Además, hizo un llamado a supervisar los cultivos que han surgido en otras regiones, como Santa Cruz y Beni.
«Mientras más atacan al Trópico de Cochabamba, más nos fortalecemos. Defenderemos esta ley. Si tenemos que recurrir a movilizaciones, lo haremos; estamos en estado de alerta. Nos ha costado sangre, luto y dolor llegar a consensuar esta ley», enfatizó Mendoza, subrayando la importancia de esta legislación para su comunidad.
La tensión entre los productores de coca de Yungas y el Trópico de Cochabamba se intensifica a medida que ambas partes defienden sus intereses en relación con la modificación de la Ley General de la Coca. El futuro de esta ley y su impacto en la producción de coca en Bolivia están en el centro de la controversia.