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Investigan en El Alto dos casos de negligencia médica

Luego de conocer dos denuncias de supuestos casos de negligencia médica en una clínica de El Alto, el Servicio Departamental de Salud (Sedes) La Paz solicitó una investigación de este establecimiento privado.

“Nos enteramos del caso del enfermo renal y por eso hemos solicitado una investigación. Pedimos además un informe de la auditoría médica interna”, explicó ayer el director del Sedes, Ramón Cordero. Añadió que este centro de salud reporte sobre las dos denuncias.

Según el presidente de la Asociación de Víctimas de Negligencia Médica, David Inca, la primera denuncia corresponde a Benjamín Zanabria, quien fue atendido en la clínica (privada de El Alto), donde le hicieron los diagnósticos necesarios y comprobaron -según un informe médico- que el riñón izquierdo estaba dañado. “Le hicieron una operación y le extirparon el riñón derecho, es decir el órgano que está bien”, aseguró.

A consecuencia de ello -aseguró Inca- ahora el paciente sobrevive con el riñón que estaba dañado y sigue en tratamiento.

Contó que la esposa del afectado, Julia R., denunció el hecho ante la Asociación. “Fuimos a ver qué pasó, pero la clínica sólo quiere hablar con ella”, dijo.

El segundo caso es el de Félix Torrez, quien fue internado por una embolia y actualmente presenta úlceras que dejan el hueso expuesto. La causa, según la denuncia, es la mala atención.

“Mi hermano está internado desde el 29 de mayo en la clínica. Él entró ahí por embolia, ya que le reventó una vena en el cerebro. Fue operado y estaba en terapia intensiva. Pero, después de 30 días, nos enteramos cuando una sobrina ingresó por casualidad y descubrió que mi hermano tenía grandes úlceras en las nalgas”, dijo un familiar de Torrez.

Indicó que durante todo este tiempo, el personal no informó a la familia sobre esas heridas que son muy profundas. “Se hizo dos limpiezas quirúrgicas y ahora la herida llegó hasta el hueso del coxis y está avanzando. No tenía los cuidados necesarios en terapia intensiva”, contó.

Sostuvo que pese a ese cuadro, el personal del nosocomio exigía a la familia que saquen al paciente porque tenía el alta. “Nos dijeron que había infecciones: VIH y neumonía”, dijo.

Otra de las irregularidades que se halló en este caso es que el monto total de cobro fue de 160 mil bolivianos. “Pero milagrosamente nos bajaron a 60 mil. Ahora creemos que es por eso”, puntualizó el familiar.

Los parientes solicitaron la intervención de las autoridades y por eso aún no sacaron a Torrez del nosocomio. Cuando preguntaron a la clínica sobre la situación el personal informó que el paciente presenta úlceras de presión como parte de los riesgos de operación. “Pero la cirugía era de la cabeza”, dijo el denunciante.

Este medio intentó comunicarse con la dirección de la clínica privada, pero no respondió.

pagina Siete.

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