
Evo Morales anuncia «pausa humanitaria» en bloqueos, pero mantendrá protestas en ciudades
- El Pacto de Unidad exige una investigación internacional por los hechos en Llallagua y responsabiliza al Gobierno por la represión.
El sector afín a Evo Morales, agrupado en el Pacto de Unidad, declaró este domingo una «pausa humanitaria» en los bloqueos de carreteras a nivel nacional, tras los enfrentamientos registrados en Llallagua y otras regiones del país. La medida se da luego de la intervención de las Fuerzas Armadas y la Policía para restablecer el orden en la zona.

En un comunicado, los seguidores de Morales señalaron que la suspensión temporal de los bloqueos se mantendrá «mientras se realice una investigación internacional, exhaustiva, transparente e independiente» sobre los operativos de represión. «Responsabilizamos al Gobierno por las consecuencias de la violencia desatada contra el pueblo movilizado», sostiene el documento.
Sin embargo, el sector evista advirtió que no cesarán las protestas, sino que las trasladarán a las ciudades. «Continuaremos con marchas, cacerolazos y la defensa de la canasta familiar», anunciaron, marcando un giro en su estrategia de presión.
Además, exigieron a la Asamblea Legislativa Plurinacional rechazar nuevos créditos internacionales, argumentando que «endeudan al país sin resolver la crisis estructural». El pronunciamiento también arremetió contra el gabinete de Luis Arce, calificando a los ministros de Gobierno, Roberto Ríos, y de Defensa, Edmundo Novillo, como «enemigos del pueblo movilizado», acusándolos de liderar la represión.
La tensión política sigue en ascenso, mientras el Gobierno y los movimientos sociales afines a Morales mantienen posturas irreconciliables. La «pausa humanitaria» podría ser solo un respiro temporal en medio de un conflicto que amenaza con escalar en las urbes.