“Fuera Maduro” y “libertad” gritaron venezolanos en La Paz

“Basta de injerencia!, fuera Maduro, fuera Cuba de Venezuela”, fue uno de los vítores de un grupo de inmigrantes venezolanos que se concentraron ayer para protestar frente a la Embajada de Cuba en La Paz.

Cerca de  las 11:00,  al menos 50 venezolanos llegaron hasta las puertas de la delegación diplomática de Cuba, ubicada  en Irpavi (zona Sur),  para -indicaron- rechazar la “injerencia de Cuba” en el país bolivariano. 

Prensa Libre

   “Libertad, Libertad”,  fue otro grito de los manifestantes, quienes llevaban puestos gorras con los  colores de la bandera de Venezuela. Otros llevaban banderas bolivianas en las manos y en sus espaldas, como capa,  la enseña  de su país. 

“Queremos que los cubanos se vayan de Venezuela, porque los cubanos lo único que hacen es robarnos el petróleo, el oro. Nos roban la comida, nos roba todo el castro-comunismo. El madurismo, el chavismo que se vayan de Venezuela,  porque eso no  sirve para nada”, protestó  uno de los ciudadanos.

Los movilizados exigieron la renuncia de  Nicolás Maduro, ya que -indicaron- con su régimen se llegó al fracaso económico en ese país. Los manifestantes, además, hicieron conocer cómo  viven en su terruño.

“20 años y tienen a  Venezuela, uno de los países  más ricos de Latinoamérica con más petróleo con más oro,  en la ruina. No se comen las tres comidas del día, no se come nada. No hay medicamentos, no hay transporte, no hay ni luz. Cinco dólares es un sueldo mensual, que no sirve siquiera para un kilo de carne”, indicó uno de los venezolanos.

En la movilización -cuyos integrantes llegaron de distintas partes del país- también se observó a niños.

 “Inteligencia cubana basta de secuestrarnos y torturarnos en Venezuela”, decía una leyenda de una de las pancartas que expusieron. La movilización no duró mas de 20 minutos y ocurre en medio de la crisis política y económica de ese país.

“Tampoco queremos que los cubanos estén en Bolivia, porque quieren traer médicos cubanos, pero acá hay profesionales médicos”, dijo otro manifestante. 

Algunos de los ciudadanos venezolanos que estaban en la concentración hicieron conocer que llegaron al país de forma reciente y contaron que arribaron a Bolivia debido a la  crisis que se vive en su país. 

Hubo quienes indicaron  que se encuentran alojados en la Casa del Migrante, ubicada en la parroquia Señor de La Paz, en la  Ciudadela Ferroviaria. 

En esa obra social sólo  pueden  alojarse  15 días, lamentaron los visitantes. 

Otros movilizados contaron que muchos que llegaron al país ya no tienen dónde dormir. Hay quienes comentaron que se  dedican a hacer múltiples trabajos para  subsistir y ganar recursos para  sustentar su alimentación.

Algunos dijeron que    venden  artesanías;  otros, dulces o simplemente realizan  cualquier  actividad callejera  para  pedir “colaboración”. 

“45 días caminando para llegar a Bolivia”

Uno de los ciudadanos venezolanos, quien pidió guardar  en reserva su nombre, contó  que llegó hace 12 días al país. “Estuve 45 días caminando,  por toda Colombia y Ecuador  para poder llegar aquí. Me dieron algunas ayudas  hasta Lima, ahí trabajé tres días y conseguí pasaje hasta Arequipa y de este lugar caminé  hasta Desaguadero”, relató.

 El inmigrante contó que salió de su país para buscar mejores condiciones de vida.  “Necesito generar recursos y ahorrar para los gastos de mi madre, que está enferma en Venezuela”, afirmó.

Él subsiste vendiendo caramelos en las calles  y diariamente gana  aproximadamente 50 bolivianos. “Compramos un paquete de caramelos y vendemos”, comenta. 

  El ciudadano venezolano se encuentra alojado en la Casa del Migrante, ubicada en la zona de Ciudadela Ferroviaria. “En ese lugar  uno  se puede quedar sólo 15 días, en tres días vence mi plazo y estoy preocupado”, lamentó.

“Me ayudaron para  comprar caramelos”

“Estoy durmiendo en la Casa del Migrante”, contó otra de las personas que salió de Venezuela. 

El entrevistado, quien pidió mantener en reserva su nombre,  llegó a Bolivia hace cuatro días, luego de recorrer durante 40 días  diferentes países. Al llegar a La Paz  le contaron que hay un lugar donde se puede cobijar del frío durante las noches.

“Es por eso que fui a la Casa del Migrante. No tengo ningún beneficio de nada. Me ayudaron para poder comprar algunos caramelos  y después trabajar y así poder comer”, relató.

Comentó que dejó  su país porque era perseguido por el régimen chavista. “Me tocó venirme casi refugiado, porque allá el Gobierno de Venezuela me estaba buscando para meterme preso, porque apoyé a la derecha”, afirmó.

Los ciudadanos venezolanos pidieron a la población “ayuda humanitaria”  para establecerse en el país. Indicaron  que cada vez  llegan más venezolanos para quedarse en el centro de acogida momentáneo.