Evo niega reunión con el Gobierno y confirma marcha a La Paz pese a inhabilitación

El expresidente asegura que no hubo diálogo con el Ejecutivo y que su postulación sigue firme. Llama a reunión nacional de emergencia para definir candidaturas.

Desde el trópico de Cochabamba, el expresidente Evo Morales desmintió este martes que se haya realizado una reunión oficial con el Gobierno para buscar una unidad de cara a las elecciones del 17 de agosto, como denunciaron algunos sectores. Aseguró que se trata de “comentarios falsos” y confirmó que la marcha a La Paz, con la que pretende inscribir su candidatura ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE), está “totalmente garantizada”.

Prensa Libre

No hubo reunión oficial con el Gobierno. Falsamente, algunos comentarios, algunas insinuaciones dicen que hubo reunión oficial con el Gobierno”, declaró Morales en conferencia de prensa.

El desmentido surge tras las afirmaciones del diputado disidente Miguel Roca (CC), quien denunció —sin presentar pruebas— que se habría concretado un pacto entre “evistas” y “arcistas” en la Casa Grande del Pueblo, a cambio de impunidad y una candidatura de Morales por el MAS.

Inscripción a pesar de la inhabilitación

Morales, inhabilitado por el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), afirmó que aún así se garantizará su inscripción como candidato, aunque reconoció que existen disputas internas que aún impiden consensuar todas las listas al Legislativo.

Convocó a una reunión nacional de emergencia para esta noche en el trópico, donde participarán dirigentes departamentales, nacionales y representantes de sectores sociales que respaldan su “revolución democrática y cultural”.

“En esta marcha del día 16 (…) está garantizada la participación del verdadero instrumento político Evo Pueblo”, aseguró, aunque admitió que algunas candidaturas aún no se han definido.

Cierre de plazos

El miércoles 14 de mayo comienza el período oficial de inscripción de candidaturas ante el TSE, y se extenderá hasta el lunes 19 de mayo. Morales mantiene su desafío abierto a pesar de su situación legal.

En su discurso, volvió a acusar al Gobierno, la derecha y los medios de comunicación de articularse para “aplazar al pueblo boliviano”, y afirmó que las elecciones de agosto serán una disputa entre “estar con el pueblo o con el imperio”.