TSE asegura que festividad de Urkupiña no se verá afectada por las elecciones generales

  • El vicepresidente del Tribunal Supremo Electoral, Francisco Vargas, confirmó que las actividades religiosas del 14 al 16 de agosto seguirán sin cambios, pese a la cercanía con la jornada electoral del 17 de agosto.

El vicepresidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Francisco Vargas, se pronunció este miércoles a través de sus redes sociales tras recibir la visita de un comité interinstitucional de la festividad de la Virgen de Urkupiña, que solicitaba la reprogramación de la fecha de las elecciones generales, previstas para el 17 de agosto.

Prensa Libre

“Respetuosos de la festividad religiosa, expusimos que las actividades que se llevarán a cabo del 14 al 16 de agosto no se verán afectadas por el proceso electoral, además manifestamos nuestra voluntad de coordinación y cooperación con las autoridades locales”, publicó Vargas en su cuenta de X (antes Twitter).

El comité interinstitucional, que llegó desde Cochabamba hasta las oficinas del TSE en La Paz, buscaba evitar que la jornada de votación coincidiera con las actividades de la festividad religiosa, una de las más importantes del país. Sin embargo, Vargas explicó que el TSE “tiene el mandato constitucional de priorizar la realización de las elecciones generales en los tiempos adecuados para garantizar la posesión de las nuevas autoridades electas oportunamente”.

Más temprano, el vicario Juan Carlos Molina, integrante del comité, señaló que aguardarían la respuesta del TSE para tomar alguna determinación respecto a las actividades religiosas que congregan en Quillacollo, Cochabamba, a miles de devotos de diferentes lugares del país y del exterior.

La festividad de la Virgen de Urkupiña, que se celebra cada año en agosto, es considerada una de las manifestaciones religiosas y culturales más importantes de Bolivia, atrayendo a miles de peregrinos y generando un impacto significativo en la economía local.

Con este pronunciamiento, el TSE busca garantizar que tanto el proceso electoral como las tradiciones religiosas se desarrollen sin inconvenientes, manteniendo un diálogo abierto con las autoridades locales y los organizadores de la festividad.