Posesión de dirigencia paralela de la regional Arapata sería nula según el estatuto de ADEPCOCA
- Desconocimiento de resoluciones de dos asambleas pone en entredicho la legalidad de la nueva dirigencia de la regional Arapata.
Miércoles, 12 de febrero, (FmBolivia).- Este lunes 10 de febrero, en horas de la noche, dirigentes de la Asociación Departamental de Productores de Coca (ADEPCOCA), a la cabeza de Daynor Choque, llevaron a cabo la posesión de una dirigencia paralela de la regional Arapata, ignorando las resoluciones de dos asambleas previas de socios de la organización.
La primera asamblea, realizada el 20 de mayo de 2024, cuando Lizette Torrez era presidenta de ADEPCOCA, ratificó el reconocimiento y posesionó a Feliza Capi como presidenta de la regional Arapata, junto a su directorio. En esa ocasión, el entonces vicepresidente de ADEPCOCA, Freddy Quispe, dio lectura a la resolución correspondiente, la cual fue aprobada en asamblea y ejecutada por el entonces secretario de organización, Diego Cruz.
Posteriormente, en una segunda asamblea el 27 de enero de 2025, ya bajo la presidencia de Daynor Choque, la regional Arapata reiteró su respaldo a la dirigencia de Feliza Capi. En dicha reunión, nuevamente se aprobó una resolución en favor de Feliza Capi.
Sin embargo, el pasado lunes 10 de febrero, pese a la existencia de estas resoluciones, el actual secretario de organización de ADEPCOCA, Carlos Gonzales, llevó a cabo la posesionó de una nueva directiva paralela, desatendiendo las decisiones previas de las bases.
Según el artículo 19° del Estatuto de ADEPCOCA, dicha posesión sería nula, ya que las resoluciones de las asambleas deben cumplirse de manera obligatoria. Dicho artículo establece que: “Las Resoluciones de la Asamblea serán definitivas y válidas aun para los asociados que no hubieran concurrido a ellas, los que no podrán formular reclamación alguna fundada en su ausencia”.
Ante este panorama, la situación en ADEPCOCA se torna cada vez más tensa, generando incertidumbre entre los socios y productores de coca de la región, quienes exigen respeto a las decisiones orgánicas de la institución.