
Paypal: emprendedores esperan su arribo, pero temen regulación
Emprendedores, jóvenes profesionales y artesanos esperan con ansias la llegada de la pasarela de pago Paypal a Bolivia para vender sus productos y servicios al extranjero de manera más ágil, pero temen que al usar la plataforma sean más regulados que en la actualidad.
La anterior semana, el Banco Central de Bolivia (BCB) emitió la Resolución 079/2022, que aprueba el reglamento para las Administradoras de Pasarelas de Pago (APP) en el país y abre la puerta a la llegada de Paypal.
El ciclo del dinero
Cada 15 días, Juan Carlos, un ingeniero de sistemas que trabaja para una compañía internacional, debe vivir una odisea cuando busca retirar los fondos que le deposita la empresa de software para la que trabaja.
El ingeniero de sistemas recibe su sueldo quincenalmente en una plataforma en dólares, pero para convertir ese dinero a bolivianos debe pedir una tarjeta de crédito prepagada o realizar compras por internet para sus familiares y amigos.
“No tengo una manera de cobrar directamente; normalmente pregunto entre mis amigos qué necesitan de Amazon o de Aliexpress (plataformas de comercio electrónico); realizo la compra con mis fondos y recibo bolivianos por ese servicio. Como lo hago sólo para conocidos, no cobro ninguna comisión”, contó.
Daniel B., quien también vende sus servicios a una empresa establecida en el extranjero, prefiere el método de la tarjeta de crédito prepagada.
“La tarjeta se puede utilizar en cualquier comercio y es práctica, el único problema es que se pierde mucho cuando se retira efectivo, pero se pueden hacer intercambios para tener liquidez”, agregó.
La artesana Claudia Medrano cuenta que realizó ventas de sus pequeñas esculturas de madera en el exterior, pero muchas veces sus clientes se desaniman cuando ella les comenta que Paypal no es un método válido para recibir pagos en Bolivia.
“He oído de métodos, abrir cuentas en el extranjero, realizar transferencias, comprar tarjetas prepagadas, hacer canjes, pero ninguno me convence. Las veces que pude vender afuera fue gracias a amigos que recibieron los pagos en el extranjero y me hicieron luego un giro, pero no es un buen método, porque pierdes dinero así”, comentó.
La artesana explicó que si Paypal llega al país, ella sería una de las primeras en adoptar la pasarela de pagos para gestionar sus transacciones. “Me haría la vida más fácil”, agregó.
Temores de mayor regulación
A pesar de la esperanza que inspira la posible llegada de la pasarela de pagos, los emprendedores con los que conversó Página Siete dicen que temen ser susceptibles a mayor regulación por parte del Estado si empiezan a utilizar esa plataforma.
“Probablemente nos pidan inscribirnos en el Régimen General del Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) y emitir facturas si queremos usar Paypal u otras pasarelas de pago. Yo estoy en el Régimen Simplificado como artesana, pero cómo van a ver que me pagan de afuera”, se pregunta Claudia.
Por su parte, Juan Carlos y Daniel señalan que ellos ya tributan como profesionales independientes por los trabajos que realizan en el país, pero temen tener problemas con el SIN por las labores que realizan como independientes para empresas internacionales si cobran sus honorarios por Paypal.
La norma del BCB incorpora a las pasarelas como firmas que cuentan con un canal de pago entre comercios y financieras.
Influencers tendrán que facturar
De acuerdo con el director de Desarrollo de Negocios de la pasarela de pago Libélula, Mauricio Dulón, si tiktokers, youtubers e influencers en otras plataformas utilizan Paypal para monetizar sus ganancias, deberán abrir un NIT y pagar impuestos.
“Si una persona, digamos un youtuber, empieza a cobrar por Paypal, esta pasarela, como cualquier otro medio de pago, es sujeto de información de impuestos. Entonces a ese youtuber le van a cobrar sus impuestos”, señaló el experto.
Dulón explicó que esta situación ya se da con negocios que buscan utilizar pasarelas de pago nacionales.
“¿Por qué no hay más comercios pequeños que utilicen pasarelas? Porque para operar deben tener un NIT y nos dicen ‘no, gracias’. No quieren porque, obviamente, para nosotros es un requerimiento que la empresa que opere con las pasarelas tenga un NIT”, explicó.
Fuente: Pagina Siete