Bolivia desafía las proyecciones internacionales y promete un destacado crecimiento económico regional
- El Ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, confirma la resiliencia de la economía boliviana en medio de un contexto global adverso.
En un anuncio sorprendente, el Ministro de Economía y Finanzas Públicas de Bolivia, Marcelo Montenegro, desestima las previsiones pesimistas de organismos internacionales y afirma que el país está en camino de convertirse en una de las economías de mayor crecimiento en la región. A pesar de los desafíos inherentes al actual contexto económico global, Montenegro confía en que el crecimiento de Bolivia continuará, impulsado por la demanda interna.
«Entonces, Bolivia va a estar entre las economías de mayor crecimiento en este entorno tan difícil y complicado de desaceleración de la economía mundial, presiones inflacionarias, altas tasas de interés y desempleo a nivel global», reiteró Montenegro en su declaración.
El Banco Mundial, en su informe más reciente titulado «Conectados: Tecnologías digitales para la inclusión y el crecimiento», revisó a la baja sus estimaciones de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Bolivia para este año, pasando del 2.7% al 1.9%. A pesar de esta proyección, Montenegro aseguró que Bolivia se mantendrá en la tercera posición en términos de crecimiento económico en comparación con otros países de la región, como Perú, Uruguay, Colombia, Argentina y Chile, que muestran porcentajes inferiores.
Según el Ministro, Bolivia ha experimentado una recuperación destacable en los últimos años, con tasas de crecimiento del 6.1% en 2021 y del 3.5% el año pasado. Además, en el primer trimestre de este año, el PIB se ha situado en un alentador 2.3%. Montenegro destacó también la notable reducción de la tasa de desempleo urbano, que ha alcanzado el 3.8% en agosto de este año, un nivel que se considera «el más bajo» en muchas décadas en comparación con otros países de la región.
Este anuncio desafía las expectativas y presenta a Bolivia como una nación resiliente en medio de un escenario económico global complejo. Con la demanda interna como motor de crecimiento, el país sudamericano se encamina hacia un futuro prometedor en el panorama económico regional.