
Al primer trimestre, la economía registró un crecimiento de 3,97%
En los primeros tres meses del año, la economía boliviana creció en 3,97%, un crecimiento aún lejano a la proyección del Gobierno de 5,1% de expansión del Producto Interno Bruto (PIB) para este año. Expertos señalan que los datos muestran que el sector de hidrocarburos ha dejado de ser el motor de la economía nacional.
De acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística (INE), los sectores que registraron mayor expansión durante el primer trimestre fueron transporte y almacenamiento, que creció en 11,09%, electricidad, gas y agua en 8,82% y construcción en 7,07%.
El INE señala que en el primer caso el incremento se debió al repunte del transporte aéreo que incrementó en 44,43% gracias al mayor flujo de pasajeros.
Respecto de los servicios básicos, la provisión de electricidad registró el mayor crecimiento de 9,60%. Por su parte, la actividad de la construcción fue impulsada por la inversión pública y las edificaciones privadas, que resultó en el incremento de las ventas de cemento en 13,78%.
Por su parte, el sector de la industria manufacturera registró un crecimiento del 2,06%, sin embargo, dentro de esta actividad, el subsector de alimentos y en especial la actividad agroexportadora mostró una expansión del 12,77%, así también la industria de carnes frescas y elaboradas que mostró un incremento de 5,78%.
“Respecto de la industria no alimentaria, destaca el crecimiento del 14,85% de las industrias químicas debido a la reactivación de la industria de úrea y derivados de litio, por su parte las industrias de productos básicos de metales se incrementaron en 10,84% principalmente debido al crecimiento de la producción de estaño metálico”, agrega el INE en su reporte.
Otros sectores que mostraron una tasa de crecimiento positiva fueron la actividad agropecuaria (5,31%), la minería (5,20%), los establecimientos financieros (4,88%), otros servicios, como restaurantes, hoteles, servicios comunales, sociales, personales y domésticos (4,80%), el comercio (3,65%), las comunicaciones (2,97%) y los servicios de la administración pública (2,93%).
El sector de hidrocarburos, por su parte, registró un crecimiento negativo de -9,2% en los primeros tres meses del año.
Menor a lo esperado
Según el analista económico Gonzalo Chávez las cifras del crecimiento al primer trimestre son poco alentadoras, teniendo en cuenta la previsión de expansión del PIB de 5,1% para 2022.
“Es un crecimiento del PIB moderado, por debajo de las expectativas del Gobierno. Hay que ver qué pasa en los siguientes trimestres, pero esta tasa de crecimiento no son buenas noticias porque se esperaba más y el balde de agua fría ha venido del sector de hidrocarburos”, expresó el experto.
Chávez indicó que, al igual que el año pasado, el reporte del INE muestra que hay grandes desigualdades entre sectores, ya que mientras la construcción y transporte han crecido de manera elevada, hay un crecimiento más lento en comercio y servicios y una caída significativa del sector hidrocarburos.
“Eso demuestra que el sector del gas está quedando en un segundo lugar. Esto es importante porque este sector daba ingresos al sector fiscal. En este año sigue la tendencia a que el gas tenga menos peso en la economía y que tenga menos peso en los ingresos del país, lo que complica el déficit público.
Por su parte, especialista en temas financieros Jaime Dunn señaló que la caída de los hidrocarburos demuestra que la era del gas ha llegado al final y que Bolivia ha dejado de ser un país hidrocarburífero.
Asimismo, el analista financiero apuntó que el reporte muestra que las exportaciones tuvieron un gran peso en el crecimiento del PIB, siendo responsables de casi la mitad de su expansión, sin embargo, advirtió que el crecimiento de éstas se deben principalmente al alza de los precios internacionales, principalmente de los minerales y las oleaginosas.
“Si analizamos los componentes de ese 3,97%, las exportaciones han tenido un impacto importante, más de la mitad de ese crecimiento es atribuible a las exportaciones, éstas están básicamente ligadas a un efecto precio, más que a un aumento en los volúmenes”, acotó.
Dunn también explicó que las cifras del crecimiento del PIB muestran un crecimiento más moderado, libre de la contaminación del efecto rebote de la economía en 2021, cuando los reportes de crecimiento mostraban tasas por encima del 6%.
“El año pasado tuvimos cifras de 10,4% en el segundo trimestre, 8,5% en el tercero y 6,11% a fin de año, ahora vemos un crecimiento más moderado, que refleja mejor la realidad de la economía en el país y que nos muestra que el efecto rebote que se veía en 2021 se ha diluido”, agregó.
Fuente: Pagina Siete