El presidente Luis Arce celebra tres años de gestión y reafirma su compromiso con el bienestar nacional
- Arce destaca los logros de su gobierno y su firmeza en el camino hacia una Bolivia industrializada
El presidente de Bolivia, Luis Arce, conmemoró tres años de intensa gestión al frente del país, marcando este hito con un mensaje en redes sociales en el que resaltó los logros de su gobierno y reafirmó su compromiso inquebrantable con la búsqueda del bienestar nacional por encima de cualquier interés personal.
En un mensaje publicado en sus cuentas de redes sociales, Arce expresó: «Ya hicimos lo más difícil. Los cimientos de una #Bolivia industrializada con una economía de base ancha están puestos y seguiremos firmes en este camino que iniciamos en unidad con el pueblo boliviano, porque ¡somos el Gobierno de la industrialización!».
Los tres años de la administración de Luis Arce han estado marcados por grandes desafíos y victorias, que el presidente atribuye al resultado de tres años de incansable trabajo en beneficio del pueblo boliviano. Arce aseguró: «No tenemos duda de que el respaldo del pueblo boliviano es amplio, porque nuestro pueblo es sabio y reconoce un Gobierno legítimo, que buscará siempre el bienestar nacional, por encima de cualquier interés personal o de grupo».
El presidente asumió el cargo el 8 de noviembre de 2020, tras ganar las elecciones con un sólido respaldo del 55% de los votos. Durante su mandato, Arce ha llevado a cabo una gestión en la que ha enfrentado el desafío de consolidar el proceso de industrialización del país, promoviendo una economía diversificada y robusta.
Sin embargo, en este camino, el líder del Movimiento al Socialismo (MAS) y expresidente, Evo Morales, se ha convertido en un adversario político, añadiendo un elemento de dinamismo a la escena política boliviana.
La celebración de estos tres años de gestión por parte del presidente Arce refleja su compromiso con el progreso de Bolivia y su determinación de seguir trabajando incansablemente en favor de un bienestar nacional duradero, independientemente de los retos políticos que se presenten en el horizonte.