Periodistas se declaran en emergencia y exigen respeto y garantías para su trabajo

«Exhortamos a los líderes políticos, sectores sociales, comités y diversas organizaciones de la sociedad civil respetar el trabajo de la prensa, cuyo único objetivo es informar a la sociedad sobre los delicados momentos que atraviesa el país», dice otro punto del pronunciamiento.

Los periodistas que salen a cubrir los hechos noticiosos en la ciudad sede de gobierno se reunieron y adoptaron una resolución, como consecuencia de los casos de agresión ocurridos desde el estallido del actual conflicto político. Se declararon en emergencia, pidieron garantías para el cumplimiento de sus tareas y demandaron a los directores o propietarios de medios de de comunicación el manejo responsable y equilibrado de la información.

«Nos declaramos en estado de emergencia ante las graves agresiones que varios periodistas, camarógrafos y fotógrafos de diferentes medios de comunicación han sufrido de parte de autoridades, actores políticos y sociales, producto de la escalada de violencia que se ha generado a raíz de los resultados de las Elecciones Generales del 20 de octubre», dice el primer punto del pronunciamiento.

PRONUNCIAMIENTO DE LOS PERIODISTAS A

LAS AUTORIDADES Y ACTORES SOCIALES

Los periodistas de base que realizamos cobertura día a día en todas las áreas que compone la sociedad boliviana, reunidos de emergencia emitimos el siguiente pronunciamiento:

1. Nos declaramos en estado de emergencia ante las graves agresiones que varios periodistas, camarógrafos y fotógrafos de diferentes medios de comunicación han sufrido de parte de autoridades, actores políticos y sociales, producto de la escalada de violencia que se ha generado a raíz de los resultados de las Elecciones Generales del 20 de octubre.
2. Exigimos a las autoridades de los niveles de Gobierno (nacional, departamental y municipal) respetar y garantizar la cobertura de prensa en esta coyuntura de crisis política, labor que se rige en los parámetros éticos y profesionales.
3. Lamentamos los enfrentamientos violentos que se han generado entre diversos sectores y grupos activos en estos conflictos y cuestionamos que las autoridades no hagan cumplir las normas, como el Decreto Supremo 2888 que prohíbe el uso de dinamita en movilizaciones. Instamos a las autoridades y a todos los actores sociales a cumplir las normas imperantes en el país, pues está en riesgo la institucionalización del Estado, elemento que abre el camino a la vulneración de derechos, incluidos los de la prensa.
4. Observamos que en muchas circunstancias la inacción de la Policía ha contribuido para que se desaten peleas campales entre ciudadanos.
5. Condenamos que las diferencias políticas e ideológicas exacerben actitudes racistas y de discriminación que provienen tanto del oficialismo como de la oposición; asimismo cuestionamos los discursos que apuntan a la confrontación entre bolivianos.
6. Condenamos y reprochamos la actitud pasiva y silenciosa de las organizaciones que aglutinan a los periodistas, que no se han manifestado respecto a los hechos de violencia. Exigimos que elaboren registros precisos sobre los casos de agresiones a los trabajadores de la prensa, acumulen pruebas e interpongan denuncias para que sean investigadas, con el objetivo de identificar a los autores de las agresiones y no queden en la impunidad.
7. Exhortamos a los líderes políticos, sectores sociales, comités y diversas organizaciones de la sociedad civil respetar el trabajo de la prensa, cuyo único objetivo es informar a la sociedad sobre los delicados momentos que atraviesa el país.
8. Ante la presencia de gente infiltrada en las movilizaciones para atacar a la prensa, advertimos que éstos serán identificados y expuestos ante la opinión pública, porque su accionar atenta contra la vida, la libertad de expresión y la libertad laboral. 
9. A los jefes de prensa y medios de comunicación pedimos manejar la información de formas responsables, equilibradas y transparentes; basadas en las normas éticas para evitar que los periodistas, fotógrafos y camarógrafos sean expuestos y víctimas de agresiones en las calles durante las coberturas. Hacer lo contrario solo pone en riesgo la integridad de los trabajadores de la prensa.
10. Exigimos que los propietarios y administradores de los medios de comunicación brinden las condiciones laborales a los trabajadores de la prensa para realizar las coberturas periodísticas, especialmente en áreas donde hay conflictos sociales y enfrentamientos.

La Paz 06 de noviembre de 2019

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