Cebras paceñas están en peligro de extinción, convocan sólo a 50
El 19 de noviembre del año pasado, las Cebras cumplieron 20 años de trabajar en el área de educación urbana. Ese día, en el festejo, participaron 147 Cebritas que sobrevivieron a la pandemia, pero fueron cesadas el 31 de diciembre. Aún esperan el pago del último mes de funciones o denominado apoyo económico, que asciende a 700 bolivianos.
De diciembre a la fecha -hace tres meses- este personaje desapareció de las calles, colegios y hospitales. Muchos ciudadanos alertaron sobre esta situación en redes sociales. Ante esta situación, en marzo se lanzó una nueva convocatoria para contratar a sólo 50. Página Siete llamó reiteradas veces a la Alcaldía, pero la entidad no se pronunció.
“Para nosotros el festejo (por los 20 años) supuso una despedida, porque corrían los rumores de que las Cebras desaparecerían y en diciembre lo comprobamos”, dijo a Página Siete una de las jóvenes que vistió el traje de Cebra por seis años.
Los educadores viales sobrevivieron hasta diciembre gracias al presupuesto que se les asignó en el POA 2021, que fue elaborado en la gestión de Luis Revilla. Para este año el presupuesto fue realizado por el alcalde Iván Arias. Este año, la comuna eliminó la dirección de cultura ciudadana, la unidad de formación ciudadana y la unidad de Cebras educadores urbanos.
La educadora contó que en febrero las redes sociales preguntaron: “¿dónde estaban las cebras?” y en marzo la Alcaldía lanzó una nueva convocatoria para contratar a 47 cebras y tres coordinadores.
Una segunda excebrita dijo que su preparación “no fue nada seria” porque dieron una charla de 20 minutos a un grupo de 30 aspirantes. No se sabe cómo seguiría su formación. “Ese tiempo no es suficiente para entender la ideología de las Cebras”.
Una tercera excebrita afirmó que ellas iban a dar talleres a las unidades educativas. “Enseñábamos valores, cultura de paz y cultura ciudadana a los niños. Esa era la filosofía Cebra. ‘Amo mi ciudad, amo el lugar que habito’”, contó.
“Ahora, las Cebras pasaron a depender de la secretaría de cultura y seguro será para que sólo aparezcan en los actos del Alcalde o en algunas actividades. Ya no habrá Cebras que realicen el trabajo de educadoras que hacíamos antes”, declaró.
Página Siete intentó obtener una versión de la Alcaldía.
El miércoles solicitó una entrevista a través de la dirección de comunicación que quedó sin respuesta y ayer solicitó conversar con el secretario de cultura, Rodney Miranda, pero, lamentablemente, no hubo respuesta de esta unidad edil.
Su trayectoria
Urbe El 19 de noviembre del 2002, las primeras Cebras salieron a las calles con un traje para dos personas. La afortunada iba adelante y la segunda debía ponerse la colita y debía permanecer agachada todo el tiempo. Su primera tarea era la de educar a los ciudadanos sobre el uso del paso de cebra.
Desarrollo El personaje creado en la primera gestión de Juan Del Granado tuvo muy buena aceptación entre la ciudadanía y los niños. Eliminaron a la “cola de la cebra” y cada joven tenía un traje propio. Su llegada fue muy bien recibida, al punto de convertirse en educadoras urbanos. En su mejor momento llegaron a ser 350 e incluso iban a animar fiestas, bajaron a más de 200 y la pandemia dejó 147. Hoy serán 50.
Cebras no reciben el pago de diciembre
Las Cebras no son funcionarios de la Alcaldía ni trabajan a contrato. La comuna paga un monto a una fundación sin fines de lucro y esta entidad distribuye este apoyo económico a los jóvenes.
Pero, las educadoras viales denunciaron que el pago de diciembre -que asciende a 700 bolivianos por Cebra- no se realizó hasta la fecha.
“No se nos pagó del mes de diciembre. Es lamentable, porque muchos jóvenes viven de ello. La Alcaldía no nos pagaba los pasajes o refrigerios que gastamos. Ahora ya son cuatro meses que no tenemos el último pago”, dijo una de las excebritas.
“Les enviamos cartas, solicitudes y hasta ahora nada. Todos estamos muy preocupados porque ese dinero nos servía para ir al instituto o a la universidad”, dijo.
Una exfuncionaria contó que el presupuesto del año pasado era de 1,4 millones de bolivianos y ahora se redujo a sólo 500 mil bolivianos.
Fuente: Pagina Siete