
Durante 2021, la Asociación departamental de Productores de Coca de La Paz (Adepcoca) generó 1,47 millones de bolivianos, según los estados financieros presentados al Servicio de Impuestos Nacionales (SIN). Legisladores, productores y dirigentes señalan que detrás de la pugna por la administración de Adepcoca, además del control de los Yungas, está la captación de estos recursos económicos.
“Sabemos que el interés más grande viene del sector del trópico, que quiere controlar a los Yungas, pero creemos que también hay intereses económicos. Cuando César Cocarico estaba como ministro (de Desarrollo Rural y Tierras) tenía conocimiento, tal vez por algún traidor de los Yungas, sobre la administración”, señala Rosalva Vargas, dirigente del Comité de Autodefensa de Adepcoca.
La semana pasada el senador Félix Ajpi, del MAS, indicó que ante el conflicto cocalero, reavivado por la instalación de un mercado paralelo del sector de Arnold Alanes, el Gobierno debería administrar la Adepcoca, por el lapso de un año.
Para la diputada Milena Reque, de Comunidad Ciudadana, ésta es la muestra de que el partido azul busca tomar el control de la organización cocalera, sin importar las formas.
“Es una necesidad que tiene el MAS, desde hace muchos años, de captar la institución. No vemos como nada bueno que se haya propuesto que el Estado administre Adepcoca por un año. Eso va a servir para que el Gobierno se instale, imponga su dirigencia y tome el control de todos sus recursos y bienes patrimoniales”, advirtió.
El diputado Andrés Romero, de Creemos, sostuvo que el movimiento económico en torno a la comercialización de la hoja y a la administración de Adepcoca es del interés del Gobierno. “No hay secreto, lo que quiere es ganarse ese dinero, administrarlo y despilfarrarlo”, afirmó.
Cuánto administra Adepcoca
Según un informe que Adepcoca presentó al SIN, entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2021, la organización generó 1.470.581 bolivianos por la administración de la asociación. La cifra es 550 mil bolivianos mayor a los ingresos declarados en 2020 cuando, por la pandemia, el mercado funcionó a medias.
Aunque el monto parece alto, entre el pago de servicios básicos, las deudas, impuestos y otros gastos, los ingresos se ven disminuidos. Prueba de ello es que durante 2021 los recursos disponibles de Adepcoca fueron de 117.610 bolivianos.
Pero, ¿de dónde salen estos recursos? “Es un tema más interno”, respondió el vicepresidente de Adepcoca, Reynaldo Laura, ante la consulta.
Adepcoca tiene 43.000 socios, en 17 regionales de las tres provincias productoras de la hoja en los Yungas de La Paz. “Como productores hacemos un aporte, pero es a nuestras comunales y regionales”, dijo Vargas.
La Adepcoca central recibe recursos de los productores por concepto de la carnetización y de las renovaciones o duplicados. Este ingreso no es fijo, ya que la entrega masiva de carnets de socios se hizo hace años, durante la gestión de Franclin Gutiérrez. No hay renovaciones anuales, por lo que sólo se reemiten cuando son extraviados.
“Los ingresos mensuales o anuales no son fijos, varían. En el caso de los ingresos por aportes y los temas de renovación de carnet no podemos dar los datos, porque al final somos una institución privada. Desde ahí nos viene esa fiscalización desde el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras”, sostuvo Laura.
Arnold Alanes, quien dirige y administra la Adepcoca paralela, tampoco dio cifras sobre los aportes que se dan en su sector. Explicó que los ingresos que llegan a la sede de Villa Fátima no son sólo por aportes.
“Cobran a los quioscos, a los transportistas, el uso de baños, etc. Se maneja mucho dinero”, insistió.
De acuerdo con un informe presentado por la directiva de la Adepcoca orgánica a sus socios, estos ingresos tampoco son fijos.
En el caso de los baños, uno en la planta baja y otro en el segundo piso, el promedio de los ingresos diarios es de 1.000 y 800 bolivianos, respectivamente. Al mes, entre ambos, se logra un ingreso de unos 36.000 bolivianos. Con ese monto se deben cancelar los gastos de funcionamiento: 20.871 bolivianos por pago del servicio de agua (factura de diciembre de 2021), 4.200 bolivianos para pago del personal y 4.250 bolivianos en insumos de limpieza.
En total, los gastos suman 29.250 bolivianos, lo que deja un saldo de 6.750 bolivianos.
Otro de los ingresos está en el transporte. Este se debe al pago que realizan los taxis que transportan la coca desde el mercado de Villa Fátima hasta distintos puntos.
Cada transportista paga 20 bolivianos día, independientemente de cuántas carreras haga. En promedio, se generan 400 bolivianos diarios, 8.000 al mes. A este monto se le debe descontar el pago de 2.163 bolivianos como sueldo a una persona que hace los cobros y controles.
También se tienen ingresos por inspectoría, que son de entre 700 y 1.000 bolivianos diarios. Otra fuente de recursos es el pago de 10 bolivianos que deben realizar los minoristas y los productores al detalle. No se logró obtener un promedio mensual. Lo mismo ocurrió con los ingresos por cobros a los quioscos y ambulantes que se apostan en los alrededores de la sede.
Las deudas
“La Adepcoca de Villa Fátima está hundida en deudas. La infraestructura tiene hasta anotaciones preventivas”, afirmó Alanes.
Consultado sobre los datos exactos afirmó que tenía todos los documentos que probaban este extremo. Tras pedir unos minutos para facilitarlos, no volvió a contestar las llamadas de este medio.
“Es totalmente falso. Hay deudas, pero no en la magnitud que dice Alanes. No sabe cómo desbaratar la marcha a la que hemos convocado y con estas declaraciones busca generar desconfianza, división y malestar entre los socios. Ése es su objetivo para mentir”, afirmó Laura.
El 14 de mayo, el directorio de Adepcoca presentó un informe financiero ante la regional de Chulumani. Se leyó una lista de deudas, heredadas de gestiones pasadas, por servicios básicos, impuestos municipales, impuestos nacionales y sueldos del personal, entre otros.
5 años de conflicto
Conflicto: La ruptura al interior de los cocaleros de los Yungas de La Paz con el Gobierno empezó el 8 de marzo de 2017, con la promulgación de la Ley General de la Coca. En rechazo a la norma, Adepcoca presentó varios recursos legales y promovió un cerco la Plaza Murillo. La tensión abrió una grieta entre ambas partes.
Paralelismo: Esta ruptura decantó en el intento del partido de gobierno de conseguir, desde dentro, una dirigencia afín al MAS. Empero, al no poder lograrlo, en 2019 se conformó una Adepcoca paralela.
Mercados: Al no poder tomar los predios ni la dirigencia de la Adepcoca orgánica, se decidió instalar un nuevo mercado. Ya van siete intentos.
Predios : El sector de Alanes ya compró dos predios. Se desconocen los montos pagados y la cantidad de aportes solicitados con el fin de hacer estas adquisiciones.
“No hay mayor secreto, lo que quiere es ganarse ese dinero, administrarlo y despilfarrarlo”.
Andrés Romero, diputado
“El interés mayor es del trópico, que quiere controlar los Yungas. Pero también hay intereses económicos”.
Rosalva Vargas, comité.
“No vemos como nada bueno que se haya propuesto que el Estado administre Adepcoca por el lapso de un año”.
Milena Reque, diputada
Fuente: Pagina Siete.