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MAS asume acciones violentas sin importar cuarentena por COVID-19

El coronavirus, una enfermedad que se expandió velozmente por el mundo, fue una oportunidad para que el MAS «levante la cabeza». En la cuarentena, desplegó sistemáticamente una estrategia de ataque a las iniciativas gubernamentales contra el COVID – 19, y se inició por afirmar que el COVID-19 es un invento de la derecha hasta organizar violentas movilizaciones.

Este 1 de mayo, que se celebra el Día del Trabajo, el masismo convocó a sus afines a violentas movilizaciones y bloqueos. La noche de ayer en la ciudad de El Alto, dos buses que transportaban médicos, enfermeras, hombres y mujeres que luchan en primera línea contra la pandemia, fueron apedreados por seguidores del masismo.

La mañana de este viernes, vecinos de Río Seco, Puente Vela, Senkata -bastión del MAS- protagonizaron bloqueos pese a la cuarentena que busca evitar la expansión del coronavirus, paralelamente en Yapacaní, Santa Cruz, hubo disturbios, un grupo de personas encapuchadas sustrajeron motocicletas retenidas por infringir la cuarentena.

Esas acciones se registran cuando en Bolivia existen 1.167 casos positivos de coronavirus y 62 fallecidos. El departamento de Santa Cruz lidera con 656 contagiados y 32 fallecidos, le sigue La Paz con 218 enfermos y 15 fallecidos a causa de este mal mundial.

Desde el MAS negaron «el boicot». Afirmaron «enérgicamente» que no emitieron ningún instructivo desde la Dirección Nacional ni desde sus candidatos para que militantes u organizaciones que se congregan en torno al instrumento político realicen actos que pongan en peligro la vida del pueblo boliviano.

No obstante, la estrategia del MAS inició con insólitas afirmaciones y actitudes por el coronavirus. Vecinos de la ciudad de El Alto, Senkata, Río Seco, afirmaron que no contraerían la enfermedad debido a que tenían buenas defensas, porque se alimentaban con chuño (papa deshidratada), trigo, quinua, , según se observa en los videos que circularon en redes sociales.

También aparecieron afiches, pegados en postes de luz en el cruce de la carretera a Viacha y avenida Mercurio del municipio de El Alto, que negaban la presencia del Coronavirus en Bolivia, esto como contracampaña a los mensajes del Gobierno que pedían quedarse en casa.

Bajo esa línea, el 21 de marzo, la diputada del MAS, Juana Quispe, aseveró que el coronavirus es un invento de la derecha y que el Gobierno usa la enfermedad para postergar las elecciones del 3 de mayo. La legisladora y cocalera del trópico de Cochabamba -fortín del masismo- aseguró que en Cuba ya hay la medicina para el COVID-19.

El segundo paso fue pedir no acatar la cuarentena. Con el argumento de que son inmunes zonas de la urbe alteña como Río Seco y Senkata; el Plan 3000 y el municipio de Yapacaní, en Santa Cruz; el trópico de Cochabamba, además de otras poblaciones del área rural, no cumplieron la medida que evita la propagación del COVID-19. Además agredieron a efectivos policiales y militares, quienes realizaban patrullajes y controles para que la ciudadanía permanezca en su casa.

«¡Añez inventó esa enfermedad! ¡Nosotros comemos chuño, somos fuertes! ¡Motines!» fueron los gritos de los vecinos del El Alto, quienes por la noche -horas después de las declaraciones de la diputada Quispe- atacaron con piedras a efectivos policiales, quienes pedían a la gente que retorne a su domicilio a cumplir la cuarentena ante la emergencia sanitaria por coronavirus en Bolivia, se observa en videos que circularon en redes sociales.

El tercer paso que dio el MAS fue convocar a la población a salir a las calles, rompiendo la cuarentena, con el argumento de que el Gobierno de Añez debe dotar de alimentos a todas las familias porque se vive del día a día, según se ve y escucha en las grabaciones de convocatoria que difundieron desde cuentas que identifican al MAS en las redes sociales.

El 31 de marzo, al menos 100 personas, que se identificaron como mototaxistas y vecinos del Distrito 5, marcharon por las calles de Riberalta hasta las puertas de Alcaldía de ese municipio, exigiendo que el Gobierno les dote de alimentos. La movilización se dio tres días antes de la entrega de la canasta familiar por emergencia del COVID – 19.

Ruth C. M., una de las dirigentes vecinales que organizó la marcha en Riberalta, departamento de Beni, confesó ante el Ministerio Público que movilizaron a la gente de escasos recursos a cambio de «favores». «Nos ofrecieron favores políticos y que iba a llegar ayuda a través de nuestros dirigentes», declaró a la Fiscalía.

Ese mismo día, Morales en su cuenta de Twitter insistió con pedir ayuda a Cuba. «Hago un llamado a la reflexión al gobierno de facto: el #Coronavirus no tiene colores políticos, el pueblo está pidiendo que retornen los médicos cubanos para trabajar conjuntamente con los médicos bolivianos. Debemos proteger la salud y la vida», escribió el 31 de marzo.

El cuarto paso fue exigir que se eleven los bonos. Luis Arce, candidato a la presidencia del MAS, pidió se suba de 500 bolivianos a 2 mil bolivianos el Bono Universal, destinado a todos los que no reciben bonos, rentas ni salario, es decir, a quienes «viven al día». Además solicitó incrementar a mil bolivianos los bonos Familia y Canasta Familiar.

Ese pedido fue replicado por dirigentes afines al MAS y en redes sociales. Paralelamente, legisladores del masismo comenzaron a exigir que se adelanten las elecciones debido a que existe pánico por el coronavirus en el país.

Siguiendo su estrategia, el quinto paso que dio el MAS fue pedir mediante sus legisladores y dirigentes, e inundar las redes sociales exigiendo que los comicios generales se realicen lo más pronto posible. La exigencia se da cuando en Bolivia, a la fecha, se registra más de un millar de casos positivos y 53 decesos.

Así lo reveló la diputada del MAS, Toribia Pomacusi, quien denunció que su colega Franklin Flores, también del masismo, intentó manipular la votación del informe de la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, para que las elecciones se realicen en julio de este año. Flores intentó esa maniobra sin ser miembro de la comisión ni siquiera adscrito. Pese a los altos índices de casos positivos, él rodillo del masismo promulgó la convocatoria a comicios.

Red central/ ABI

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