Organizaciones sociales destacan promulgación de la Ley del Sistema Único de Salud
Representantes de organizaciones sociales destacaron el miércoles, por separado, la promulgación de la Ley 1152 del Sistema Único de Salud (SUS), que beneficiará con atención gratuita a más de 5 millones de personas que no cuentan con un seguro médico.
El secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Juan Carlos Huarachi, saludó la decisión del Gobierno de trabajar en la redacción de esa norma, la que será «recordada» -dijo- por todos los bolivianos toda la vida.
«No va a ser una tasa de leche, el reto ahora empieza una vez implementada y el de garantizar la sostenibilidad del SUS. Como Central Obrera Boliviana vamos a trabajar junto al Gobierno para que este seguro llegue a todas las personas», indicó.
El secretario ejecutivo de la Confederación Nacional de Trabajadores Gremiales de Bolivia, Juan Carlos García, agradeció al presidente Evo Morales por la promulgación de esa norma, y al Gobierno nacional porque trabajó velando por los más pobres y los más necesitados.
El SUS favorecerá a los sectores excluidos por muchos años, entre ellos, campesinos originarios, gremiales, trabajadores por cuenta propia, choferes, entre otros, y su implementación arrancará el 1 de marzo con más de 300 prestaciones gratuitas.
El dirigente de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba, Leonardo Loza, calificó esta jornada de «histórica e inédita», y dijo que por fin se escuchó el pedido del pueblo boliviano de contar con salud gratuita.
El secretario ejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores de Bolivia (CSUTCB), Jacinto Herrera, indicó que más de 3 millones de afiliados de su sector se verán beneficiados con el SUS «por primera vez en la historia».
El presidente de la Confederación Universitaria Boliviana (CUB), Max Mendoza, aplaudió la promulgación de esa norma y aseguró que la defenderá porque es un derecho de todo ciudadano «tener salud gratuita».
El Gobierno garantizó un presupuesto inicial de 200 millones de dólares para el inicio del SUS y otros 2.000 millones para la construcción de hospitales, además de 30 millones para fortalecer el equipamiento y el número de profesionales que atenderán a los pacientes.
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